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55.299
Ciencia ficción. Acción. Aventuras
Veintidós años después de lo ocurrido en Jurassic Park, la isla Nublar ha sido transformada en un enorme parque temático, Jurassic Wold, con versiones «domesticadas» de algunos de los dinosaurios más conocidos. Cuando todo parece ir sobre ruedas y ser el negocio del siglo, un nuevo dinosaurio de especie desconocida, pues ha sido creado manipulando genéticamente su ADN, y que resulta ser mucho más inteligente de lo que se pensaba, se ... [+]
12 de junio de 2015
504 de 658 usuarios han encontrado esta crítica útil
Odio eterno al cine moderno. Lo siento, la tomadura de pelo ha llegado demasiado lejos. La nueva era del cine de entretenimiento no da más de sí. Todos los grandes éxitos de taquilla de hoy en día salen de fábrica cumpliendo con las mismas premisas de siempre: trama simple, duración desmedida, personajes estereotipados, efectos digitales a tutiplén y exageración tremebunda. Ahí podemos incluir todas las de superhéroes, robots, naves espaciales, alienígenas etc. que nos llegan año tras año y bombardean las carteleras.
No es que no me parezca legítimo que se hagan, al contrario, muchas son ideadas así desde su concepción, saben lo que ofrecen y su público sabe lo que va a recibir a cambio: el espectáculo más vacuo y convencional del mundo, pero entretenimiento al fin y al cabo.
El verdadero problema es que no sólo la forma de hacer cine está desgastada, también lo está la originalidad, y claro, para qué idear algo nuevo cuando existen los reboots, remakes y secuelas. De modo que ahora es muy común ver cómo películas míticas que forman parte de la historia del cine, que han dejado un legado en el tiempo son puestas de nuevo en el escaparate de Hollywood con todo lo que ello conlleva.
A priori puede parecer estimulante el hecho de volver a revivir con nostalgia estas grandes cintas que una vez nos impresionaron y se ganaron nuestro corazoncito, pero la triste realidad es que son cercenadas, masacradas y defenestradas sin piedad y sin ningún tipo de escrúpulo, ¡plof!, me paso por la zona escrotal tu infancia y años mozos sin anestesia. Se sigue un proceso de momificación por el cual las entrañas son extraídas y tiradas a la papelera para dejar únicamente la carcasa, convirtiéndose en subproductos meramente superficiales de lo que una vez fueron. Les arrebatan toda su identidad y esencia, se vuelven totalmente artificiales y son transformados en la misma mierda reciclada que nos están ofreciendo día tras día. Buena cuenta de ello pueden dar los terminators, robocops, desafíos totales, aliens, predators y ahora le ha llegado el turno a Jurassic Park.
Spielberg, que es más listo que nadie y sabe de sobra que la saga del parque no da para más, pone la película bajo la dirección de Colin Trevorrow con el fin de que se coma él el marrón mientras éste se dedica a la contabilidad. El amigo Colin, que veía venir el abrazo del oso a cambio de una buena remuneración hace lo que puede con el material que le dan, y madre del amor hermoso… ¡Qué guión! ¿Para esto tanta expectación? ¿Esta era la secuela que se estaba cocinando a fuego lento y retrasando continuamente para conseguir una historia a la altura, no digo de la original, eso sería poco más que un milagro, pero al menos que cumpliese las expectativas? Pero si no es más que un refrito de la primera y elaborada con la dudosa calidad fílmica de la tercera. ¡Vamos hombre!
Lo de la dudosa calidad fílmica viene bajo la batuta del amigo Trevorrow, que ahí ya no puede escurrir el bulto y debe apechugar por ser cómplice de esta profanación. Todo en la cinta es puro convencionalismo, absolutamente todo. Las premisas del cine actual se cumplen a rajatabla: el refrito del guión, la elevada duración del metraje, los personajes y dinosaurios mejor lo dejo para el spoiler, los efectos especiales cantan ópera… En fin, se han olvidado de la magia y de lo que nos hizo sentir Parque Jurásico en los 90’s y los grandes mitos del cine fabricando estas birrias sobreexplotadas.
Por cierto, habrá reboot de "Le llamaban Bodhi", lo espero como agua de mayo.
¿Suspense? ¿terror? Bueno sí, hubo momentos en los que tenía que taparme la cara…
No es que no me parezca legítimo que se hagan, al contrario, muchas son ideadas así desde su concepción, saben lo que ofrecen y su público sabe lo que va a recibir a cambio: el espectáculo más vacuo y convencional del mundo, pero entretenimiento al fin y al cabo.
El verdadero problema es que no sólo la forma de hacer cine está desgastada, también lo está la originalidad, y claro, para qué idear algo nuevo cuando existen los reboots, remakes y secuelas. De modo que ahora es muy común ver cómo películas míticas que forman parte de la historia del cine, que han dejado un legado en el tiempo son puestas de nuevo en el escaparate de Hollywood con todo lo que ello conlleva.
A priori puede parecer estimulante el hecho de volver a revivir con nostalgia estas grandes cintas que una vez nos impresionaron y se ganaron nuestro corazoncito, pero la triste realidad es que son cercenadas, masacradas y defenestradas sin piedad y sin ningún tipo de escrúpulo, ¡plof!, me paso por la zona escrotal tu infancia y años mozos sin anestesia. Se sigue un proceso de momificación por el cual las entrañas son extraídas y tiradas a la papelera para dejar únicamente la carcasa, convirtiéndose en subproductos meramente superficiales de lo que una vez fueron. Les arrebatan toda su identidad y esencia, se vuelven totalmente artificiales y son transformados en la misma mierda reciclada que nos están ofreciendo día tras día. Buena cuenta de ello pueden dar los terminators, robocops, desafíos totales, aliens, predators y ahora le ha llegado el turno a Jurassic Park.
Spielberg, que es más listo que nadie y sabe de sobra que la saga del parque no da para más, pone la película bajo la dirección de Colin Trevorrow con el fin de que se coma él el marrón mientras éste se dedica a la contabilidad. El amigo Colin, que veía venir el abrazo del oso a cambio de una buena remuneración hace lo que puede con el material que le dan, y madre del amor hermoso… ¡Qué guión! ¿Para esto tanta expectación? ¿Esta era la secuela que se estaba cocinando a fuego lento y retrasando continuamente para conseguir una historia a la altura, no digo de la original, eso sería poco más que un milagro, pero al menos que cumpliese las expectativas? Pero si no es más que un refrito de la primera y elaborada con la dudosa calidad fílmica de la tercera. ¡Vamos hombre!
Lo de la dudosa calidad fílmica viene bajo la batuta del amigo Trevorrow, que ahí ya no puede escurrir el bulto y debe apechugar por ser cómplice de esta profanación. Todo en la cinta es puro convencionalismo, absolutamente todo. Las premisas del cine actual se cumplen a rajatabla: el refrito del guión, la elevada duración del metraje, los personajes y dinosaurios mejor lo dejo para el spoiler, los efectos especiales cantan ópera… En fin, se han olvidado de la magia y de lo que nos hizo sentir Parque Jurásico en los 90’s y los grandes mitos del cine fabricando estas birrias sobreexplotadas.
Por cierto, habrá reboot de "Le llamaban Bodhi", lo espero como agua de mayo.
¿Suspense? ¿terror? Bueno sí, hubo momentos en los que tenía que taparme la cara…
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
...de la vergüenza ajena!
Los humanos son estereotipados hasta la nausea. El encantador de raptores viril y la pelirroja, que se hace maratones por la selva con tacones de aúpa, tienen un romance mientras se hallan rodeados de cadáveres.
La carnicería está perpetrada por unos pajarracos puestos de LSD hasta las cejas, que igual se lanzan a lo bestia sobre el público del parque como si llevasen un mes sin comer que intentan realizar la cópula con un helicóptero en vuelo con desastrosos resultados.
Lo que realmente asusta del Indominus rex es su poder de persuasión. La escena en la que lobotomiza a una manada de raptores en cero coma es de auténtico sonrojo.
La pelea final es de traca. Si creías que lo de Parque Jurásico III era insuperable, con Jurasic World todo alcanza una nueva dimensión. Superblasa-T-rex reparte cera al Indominus rex, y como si de un combate de lucha libre se tratase se va turnando con los velociraptores hasta que solicita el relevo del bicho del lago que se lo acaba zampando. Qué compañerismo, qué emoción, qué nostalgia. Pues sujeta las tetas guapa que ahora viene lo hardcore. La T-rex y el velociraptor superviviente se ve que se llevan de fábula, no sólo entre ellos, también con los protagonistas, porque acaban despidiéndose de forma cordial, faltaron apretones de mano.
¡Penas de cárcel ya por favor!
Los humanos son estereotipados hasta la nausea. El encantador de raptores viril y la pelirroja, que se hace maratones por la selva con tacones de aúpa, tienen un romance mientras se hallan rodeados de cadáveres.
La carnicería está perpetrada por unos pajarracos puestos de LSD hasta las cejas, que igual se lanzan a lo bestia sobre el público del parque como si llevasen un mes sin comer que intentan realizar la cópula con un helicóptero en vuelo con desastrosos resultados.
Lo que realmente asusta del Indominus rex es su poder de persuasión. La escena en la que lobotomiza a una manada de raptores en cero coma es de auténtico sonrojo.
La pelea final es de traca. Si creías que lo de Parque Jurásico III era insuperable, con Jurasic World todo alcanza una nueva dimensión. Superblasa-T-rex reparte cera al Indominus rex, y como si de un combate de lucha libre se tratase se va turnando con los velociraptores hasta que solicita el relevo del bicho del lago que se lo acaba zampando. Qué compañerismo, qué emoción, qué nostalgia. Pues sujeta las tetas guapa que ahora viene lo hardcore. La T-rex y el velociraptor superviviente se ve que se llevan de fábula, no sólo entre ellos, también con los protagonistas, porque acaban despidiéndose de forma cordial, faltaron apretones de mano.
¡Penas de cárcel ya por favor!