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Voto de Melli:
7
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12.976
Thriller. Acción
Porter (Mel Gibson) y Val (Gregg Henry) cometieron un atraco, pero Val había planeado eliminar a su colega para quedarse con todo el botín. Como no consiguió matarlo, Porter decide vengarse de quien le ha robado su dinero y a su mujer (Deborah Kara Unger). Para ello cuenta con la ayuda de Rosie (Maria Bello). (FILMAFFINITY)
20 de junio de 2007
50 de 56 usuarios han encontrado esta crítica útil
Contrariamente a la amplia mayoría de las pelis del género, en ésta cinta de Brian Helgeland no vamos a ver una historia monótona y a unos rusos, chinos o norteamericanos demostrándonos sus habilidades karatekas, kungfunianas o de tei-chi-chuan mientras los enemigos se quedan parados estupefactos esperándo las triples patadas voladoras que los fulminen. Ni tampoco al último modelo de los Mercedes escapándose de la pantalla del Need For Speed para chocar a máxima potencia con la Ferrari reformada de Schumi pero conducida por algún actor hollywoodense que no sabe hacer otra cosa. No en ésta ocasión.
Principalmente estamos en una situación de venganza personal. Porter es un tipo duro que casi ni habla, apenas susurra su nombre para presentarse a quien sea que va a matar. Ya no rie, no grita, no llora: la herida del pasado aún no se le ha cicatrizado, y no podrá vivir hasta que coma del sabor de la venganza.
No quiere cualquier dinero de cualquier persona, quiere su dinero y que el tipo que lo estafó pague por ello. Y así nos sumerge en una historia que más bien es el recorrido de un hombre hasta llegar a su objetivo, contra todos los obstáculos que entorpecen todo camino.
Hay acción, pero de la buena. Y lo que es mejor, que las escenas de acción no son el centro de la película, sino solo un condimento, un agregado inevitable de la historia que nos cuenta, y que además de acción tiene ingenio, y un papel a la medida del viejo Gibson.
Principalmente estamos en una situación de venganza personal. Porter es un tipo duro que casi ni habla, apenas susurra su nombre para presentarse a quien sea que va a matar. Ya no rie, no grita, no llora: la herida del pasado aún no se le ha cicatrizado, y no podrá vivir hasta que coma del sabor de la venganza.
No quiere cualquier dinero de cualquier persona, quiere su dinero y que el tipo que lo estafó pague por ello. Y así nos sumerge en una historia que más bien es el recorrido de un hombre hasta llegar a su objetivo, contra todos los obstáculos que entorpecen todo camino.
Hay acción, pero de la buena. Y lo que es mejor, que las escenas de acción no son el centro de la película, sino solo un condimento, un agregado inevitable de la historia que nos cuenta, y que además de acción tiene ingenio, y un papel a la medida del viejo Gibson.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
Por ahí leí una crítica que dice algo como: -de donde sacó Porter la bomba que utilizó al final?
La respuesta es: es la misma bomba que le plantaron a él en el hotel donde se alojó antes. Porter los llevó allí haciéndoles creer que era el lugar donde tenían secuestrado el hijo, pero su intención jamás fue revelarles el paradero, sino matarlos con su propia dinamita.
La respuesta es: es la misma bomba que le plantaron a él en el hotel donde se alojó antes. Porter los llevó allí haciéndoles creer que era el lugar donde tenían secuestrado el hijo, pero su intención jamás fue revelarles el paradero, sino matarlos con su propia dinamita.