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Voto de La Claqueta Metálica:
6
Drama. Thriller Han pasado 20 años desde que Mark Renton abandonara Escocia, y la heroína. Ahora, Renton vuelve a su Edimburgo natal con el objetivo de rehacer su vida y reencontrarse con sus amigos de toda la vida: David "Spud" Murphy, y Simon "Sick Boy" Williamson; al mismo tiempo que Francis "Franco" Begbie sale de la prisión con sed de venganza.... Secuela de 'Trainspotting' (1996), basada en 'Porno', la siguiente novela de Irvine Welsh. (FILMAFFINITY) [+]
13 de marzo de 2017
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La película deja a un lado las drogas y el “elige tu vida” para hablar de la madurez, o más bien de la inmadurez. Y vemos a cuatro adultos en el mismo punto emocional con el que finalizó la anterior entrega. Con arrugas pero sin cabeza, con hijos pero sin responsabilidad y con un pasado tan crudo como su propio presente.

Estamos ante un gran homenaje a la primera película. Mediante la música, los guiños y flashbacks nos recuerda constantemente qué convirtió a Trainspotting en una obra de culto. Como un atleta muestra su trofeo, Boyle muestra las escenas más potentes de la precuela, orgulloso de su trabajo y enamorado de su creación. Sin embargo los años pasan factura, y la película carece de la frescura y el magnetismo de la primera. Los personajes carismáticos de hace dos décadas, son una sombra pretenciosa de lo que fueron.

La historia es floja y previsible. Con la novedad de una nueva incorporación femenina, que sirve como contraste de la pareja formada por Rendom y Boy Sick, pero que no acaba de encajar. A esto se une una historia en paralelo de Francis que desaprovecha a un personaje grandioso. El único que sale ganando en este encuentro es Spud, con más protagonismos que en la primera edición y con alguno de los mejores momentos en pantalla.

A pesar de lo comentado, la dirección de Boyle sigue siendo tan única como espectacular. Reaparecen los planos expresivos y narrativos, efectos de cámara tan sorprendentes como potentes, y una banda sonora que acelera las pulsaciones.

Por lo tanto estamos ante una película que supone un impuesto a la nostalgia. Los fans no tendrán otro remedio que ir al cine, no tanto para ver cómo continua la historia, sino para recordad el origen. Saliendo de la sala con el mono de volver a ver la primera parte y escuchar nuevamente como Ewan McGregor nos da una lección de vida: “Elige la vida. Elige un empleo. Elige una carrera. Elige una familia. Elige un televisor grande que te cagas…”.

Más en: www.laclaquetametalica.com
La Claqueta Metálica
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