El reparto magnífico, tanto Bruce Willis (a pesar de no ser el estilo al que nos tiene acostumbrados) como Michelle Pfeiffer demuestran una química perfecta en la película. Sencilla, sin efectos especiales, nos muestran una historia por la que muchos matrimonios pasan a lo largo de su vida. Los flash backs te hacen meterte dentro del matrimonio y de la historia, y te enseñan que no todo es siempre felicidad. Si has estado enamorado es fácil comprender su historia.