Habrá que madurar un poco antes de verter una opinión mediocre sobre una película que a riesgo como afirman los "expertos" del ámbito aquí, carece de historia, de drama de pasión y de no sé que más cosas por el estilo.
Seamos sinceros con nosotros mismos, ver esta a película se convierte en un reto, no por lo mala que pueda resultar (que desde ningún punto de vista lo es) sino porque desenmascara nuestra capacidad de asimilar el mensaje de una cinta.
quienes osados vieron en la película de Underwood a un gorilota hediondo, queriendo emular al absurdo más grande de todos los tiempos como lo es King Kong, y a unos simplones como Paxton y Theron haciendo de las suyas con la totalidad de la cinta pues no vieron la película.
El mensaje, claro como mas no puede ser, el salvar la vida salvaje no sacándola a esta de sus hábitats, sino protegiendo los mismos, conservación in situ per se, la verdadera cara de los refugios de animales, el poder tras el comercio de la vida salvaje y un rendido y merecido homenaje a Dian Fossey.
¿Que no saben quién es Dian Fossey? vamos habrá que leer un poco mas antes de opinar entonces.
La historia, no puede ser menos sencilla, pero es bueno que así sea, o es que acaso alguno esperaba ver a Joe en Matrix en Mente Brillante?
El cuerpo de la cinta se desarrolla en armonía y hay por suerte una marca ausencia de estupideces que otros calificarían de excelentes aciertos cinematográficos.
Escenas cargadas de emotividad fácil pero que resultan en mentes despejadas y no saturadas por sofisticaciones del cine contemporáneo. Unos FX estupendamente logrados que merecieron una nominación al óscar a los mejor efectos visuales, y con justa razón. la música de Horner que siendo sensato, no se puede calificar como menos que una miscelánea de composiciones reminiscentes a otros éxitos suyos, pero que de ninguna manera flojean, y al contrario, logran acentuar las escenas emotivas del film. Paxton? me parece regular, Theron, muy simpática, el resto cumple.
Para concluir diré simplemente que teniendo 27 años un hijo de 3 años, una esposa de 26 y un gatito que se me perdió antes de ayer, he disfrutado nuevamente viendo al gorilota después de mucho tiempo, y como aquella primera vez, la película ha logrado conmover mi espiritu conservacionista y respetuoso de la vida salvaje. Que bueno sería si el mundo fuera como nos lo muestra Joe, ancho y ajeno, para correr sin temor a la muerte.