La película, a la que hago crítica, está destinada a formar parte de la cartelera en el canal de la Metro Goldwyn Mayer, y la verdad es un film al que he llegado tras teclear el nombre del director, ya que, la película viene titulada en la guía del mando como "testigo en la sombra", un título inquietante, paraun engendro que es todo lo contrario, por no inquietar pasa tan desapercibido, que no durará en mi memoria más de una hora.
Se trata de una hiperdesconocida cinta, ramplona y surrealista en determinados momentos, suficientemente entretenida para pasar la hora y pico que dura delante del televisor.
Con actuaciones mediocres, guión de serie, y unos primeros compases acertados, el final naufraga, por no poder sacar a relucir las cualidades positivas que se esperaban.
Su argumento no es del todo desechable: Una pareja (el nombre de los actores he de suponer que son Paul Johansson y Maxwell Caulfield), son testigos de una paliza perpetrada por unos policias (el cártel del film tiene tela...) y él decide grabar la pelea. La cosa se complica (para ellos puesto que la peli es más facil que el mecanismo de un alfiler), cuando uno de los policias descubre que están siendo grabados. La película es inconsistente, sabe en todo momento cuál es su juego, pero en ningún momento llega a ser verdaderamente impactante.
En general, es una apuesta que pasa muyyy desapercibida, que canta por todos lados, efectiva en la acción en sus primeros compases, pero bastante surrealista, con situaciones que no van al caso (asesinatos que se dejan sin resolver... atracos que no guardan sentido... peleas que no van a ningún lado... etc etc), y dejando cabos sueltos. Si le pongo tan "elevada" nota es porque considero que me tuvo entretenido, y porque cosas peores se han visto.