Cuando uno repasa la filmografía de Coppola y ve títulos como "El padrino", "Apocalypse Now" o "Drácula", se da cuenta de que hay películas que han quedado cubiertas por la fama de éstas y suelen estar un poco olvidadas por el gran público.
Éste es el caso de “La conversación”, una magnífica película que sin duda debe incluirse entre lo mejor del director. En ella se nos cuentan los problemas por los que pasará un investigador privado a raíz de un trabajo consistente en intervenir una conversación entre una pareja y como se irá entrometiendo en el asunto más allá de lo exigido por sus competencias profesionales. El protagonista está encarnado por un Gene Hackman que se aleja de sus papeles de poli duro para crear a un tipo inseguro, reservado y con problemas para comunicarse con los demás, logrando una de las mejores actuaciones de su carrera. En el resto del reparto, unos cuantos nombres típicos de las películas de Coppola en esta época (John Cazale, Harrison Ford o Robert Duvall), dan empaque al global por medio de sus papeles secundarios. Además tenemos al Coppola de su mejor época con algunos planos realmente magistrales a la vez que nos deleita en su faceta como guionista con una historia que atrapa y que sabe como jugar con el espectador.
Por todo ello nos encontramos con que la única manera de entender el olvido de este thriller es el hecho de que se trate de una película pequeña rodada entre las dos primeras partes de la saga de los Corleone.

Película sobre un ex-boxeador al que la vida no para de darle palos (mata accidentalmente a su cuñado, muere su mujer, debe dinero, su hijo está enfermo del corazón,...) y que como última solución a sus problemas deberá participar en el campeonato irlandés gitano de boxeo sin guantes (sí, no me lo invento). Intentar una reflexión seria sobre esta película es una irresponsabilidad por el simple hecho de que es imposible tomársela en serio. El guión es un cruce entre un culebrón de sobremesa y el enésimo retorno de Rocky, los actores están totalmente pasadísimos de rosca (ahora los comento por que no tienen desperdicio), los combates son lo más falso que he visto en mi vida, los intentos de conmover al espectador no pasan de eso, intentos, y la trama se estira para llegar hasta las dos horas, cuando con 80' hubiese tenido de sobra.
Ahora lo de los actores. El protagonista es un Michael Madsen que me imagino tenía algunas facturas pendientes y por eso aceptó el papel, porque está claro que su implicación en la peli es la de llevárselo crudo. Luego tenemos al gran Vinnie Jones, que como personaje "malvado" es un chiste en si mismo. Y para acabar con las “estrellas” tenemos a un Richard Chamberlein que debe estar bastante contento con el plato de lentejas (no creo que pida más) que le dieron por su papel de viejo entrenador. Además tenemos al crío hostiable de turno y al peor actor de la historia encarnando al amigo-ahijado del protagonista. Pero a pesar de todo esto, o mejor dicho, gracias a todo esto, me lo pasé realmente bien. Si a los 5 minutos ya estaba riéndome de unas situaciones cercanas a la parodia, rayando con la vergüenza ajena, con el combate final ya simplemente estaba descojonado ante la mirada atónita de la gente que se sentaba a mi alrededor. Así debéis entender que aunque la peli sea de lo peor que he visto en una sala de cine, no puedo menos que aprobarla y darle un merecido 5.

Si con “El expreso de medianoche” nos quedó muy claro que no debemos pisar una cárcel turca, con esta otra he aprendido que tampoco debo pisar una cárcel albanesa. La historia en si no es gran cosa, basada en hechos reales (como no), nos cuenta las aventuras de un joven albanés con ganas de salir a conocer mundo para convertirse en una estrella de rock y que acabará vendiendo su trasero al mejor postor en los bares de ambiente atenienses. De ahí a ser deportado a su país y caer en la cárcel ya sólo hay un paso como podéis imaginar. La película tiene una factura de telefilm que tira para atrás, sobre todo las escenas de “acción”, y el actor protagonista debe ser la versión griega de Ben Afleck. Pero de todas formas entre tanto drama humano no sé por qué pero éste no me terminó de desagradar. Un 5 (pese a q estoy seguro q no lo merece).

El otro día en una de mis visitas al cash converters de mi ciudad me topé con esta cinta. La sinopsis trasera y las fotos que la acompañaban me indicaban claramente lo que había: un slasher cutrongo que fusilaba todos los refritos existentes en la ecuación "jovenzuelos + día de San Valentín + asesino en busca de venganza". No me inspiraba mucha confianza pero ya que me salía por 20 duros decidí llevármela y es que sabiendo de lo que trataba por mala que fuese siempre se puede pasar el rato.
Una vez vista sólo puedo decir: "La encontré", y es que se trata de la peor película que he visto en mi vida, sin ningún tipo de dudas. Difícilmente se podrán unir otra vez unos actores tan malos (cuyo único punto a favor es la típica jovencilla con ganas de enseñar carne), un guión que haría de cualquier capítulo de Scooby Doo una obra cumbre del misterio y una realización penosa a cualquier nivel, ya sea fx, fotografía, dirección, etc...
Me imagino que para los ultrafans del slasher puede tener un pase, ya que serie B, sangre (poca) y carne (poca tb), suele ser suficiente en muchos casos. Pero es que la peli no tiene perdón de Dios. No te la puedes tomar en serio porque hace aguas por cualquier parte y no te la puedes tomar a coña porque la única risa que provoca es de vergüenza ajena al ver el producto final.
En fin, al menos la cosa tuvo final feliz ya que la llevé de vuelta al cash aduciendo que no la cogía mi vídeo y me dejaron cambiarla por otra del estante. En este caso un valor seguro, "Matinee".

Según nos dijeron durante su presentación en el festival de Sevilla de hace unos años, se trata de la película búlgara más importante de la última década y tras verla sólo puedo decir que así les va. 60 minutos de entretenimiento exótico (sin llegar a entusiasmar en ningún momento) dan paso a los 20 minutos más sosos, aburridos, vacíos, vacuos o como quieras llamarlos, que yo recuerde, y además hay que añadir uno de los finales peor resueltos que he visto nunca. Por cierto, la historia va de una chica que llega huyendo a un pueblo de la frontera en el que sólo habita un pequeño grupo de ancianos que se hará cargo de ella