Sigo pensando que a estas alturas hay planos que no se deben permitir, como el de los dedos de un actor que no tiene idea de tocar un instrumento, fingiendo seguir melodías del calibre de grandes compositores; a poco que alguien tenga formación musical se dará cuenta de que van por líneas distintas-
Por otro lado la comedia en los distintos planos, bien sean en actores principales o secundarios se hace realmente amena y atractiva, mostrando en gran parte la realidad en la que los músicos profesionales viven, y por supuesto muy ayudada del carácter excéntrico del Maestro.

Como aficionado más que amateur, puedo decir que el 3D sigue sin valer la pena.

El argumento es inesperado, en la mayoría de los aspectos (si cabe algún momento en que se reduce el tiempo, afectando alguna escena dejándola coja de emociones).
La BSO es más que acertada, y sobre todo los últimos 25 minutos imagen y sonido hacen vibrar a cualquier espectador con un final espectacular.

En resumen, lo mejor que he visto en animación para la educación en valores ( para aquellos que se dediquen a la docencia o no), diversión, y mostrar el precioso vínculo que se puede tener animal / ser humano.