Se han escrito tantas críticas de la serie que dudo que alguien lea ésta. Pero hay cosas muy puntuales de las que me interesaría dejar mi opinión.

La primera quizás sea: ¿Esto es lo que tanta opinión especializada dice está llamado a ser el reemplazo de “Juego de Tronos”? Por Dios.

Acerca de la serie, debo decir que no pertenezco a ninguna rama del fandom, por lo que mi opinión se basa en la serie excluyentemente.

Qué pena me da que Henry Cavill no sea Superman la verdad. Pero aquí en ésta serie prácticamente lo es, soportando sobre sus espaldas una serie en caída libre, impidiendo que ésta se estrelle en el fracaso.

La productora asegura haber visto más de 200 audiciones antes de darle el papel a Cavill… ¿Cuántas habrá visto para darle el papel a Chalotra? Porque parece estar haciendo un personaje de otra producción. Que misterio el tema del casting de ésta serie.

Otro tema es el guion de la serie. Realmente escaso. En el apartado dirección, la serie navega en vaivenes azarosos, siendo las intervenciones de Alik Sakharov de lo menos afortunado de la temporada.

Las escenas de acción son escasas, demasiado rápidas y cortas y el CGI, también escaso.

Los escenarios, la magia, el drama, el guion… Escasos.

Todo se queda corto aquí, aún con el potencial que, a priori, tiene ésta historia.

Pero no todo es malo, como ya mencioné, Cavill lo pone todo, hasta camina como el personaje del videojuego cuando la toma lo precisa, le da timing y sentido a la historia. Una lástima que a uno de los actores físicamente más impresionantes de la industria en estos momentos no se le haya sabido aprovechar del todo, seguro que en manos más firmes le da más poder al personaje.

Henry Cavill es a The Witcher lo que The Witcher no ha sabido ser a Henry Cavill.

Una mención especial a Freya Allan. Un verdadero acierto del casting. Esa joven actriz va a comenzar a aparecer seguido en pantalla, su rostro, su empatía interpretativa y, como no, su acento británico, harán las delicias del público americano.

Si Netflix afina la puntería con los escritores y directores, la serie y el protagonista tienen mucha madera.

He leído los extractos de la crítica recompilados por Filmaffinity, y hasta me tomé la molestia de leer algunas de esas críticas completas, lo que me salvó de insultar a la tal Tomris Laffly de Variety, que no hace una tan mala crítica después de todo, pero que hace una innecesaria e incomprensible comparación con “Día de Entrenamiento” con la clara intención de bajarle el precio a la peli de la que hablamos. En fin, críticos pagados de emporios periodísticos.

La peli es en general Buena, o quizás Regular para paladares muy exigentes. Se las arregla más o menos bien entre lo que tiene y lo que quiere, y más o menos bien quiere decir que por momentos se queda a mitad de camino en algunos recursos importantes como el guion, las actuaciones y las secuencias de filmación.

No quiero ser aburrido, vamos con las dos caras de la moneda y me ahorro el testamento que no soy ningún sabelotodo.

Lo Malo:
El mensaje moral, el mensaje social, esta algo banalizado, lo que decanta a la peli de drama policial a película de acción/suspenso (o suspense) simplemente.
Las actuaciones en general (salvo excepciones que a rigor nombraré) son mediocres, quizás algo falló en el casting porque al villano de la peli creo que le dejaría llevar a mis hijos al parque un rato. La sobreactuación se hace bastante notable en algunos casos.
Las moralinas evocadas por la protagonista suenan demasiado impostadas. Cuesta tomarlas en serio.

Lo Bueno:
Las escenas de acción son bastante entretenidas.
El clima de tensión es logrado con relativa efectividad.
El espiral de suspenso (o suspense) buscado por el director, por momentos es conseguido.
La actuación de Harris es sólida (salvo cuando le toca recitar las moralinas), pero resulta muy convincente en su papel de asediada. Tyrese Gibson cumple muy bien con su rol. Ambos le aportan a la peli en general una credibilidad que de otra forma dudo que haya conseguido.

En fin, una buena de acción y suspenso (o suspense) para pasar el rato si te gusta el género.

No sé muy bien de que iba el cine en los 70 (yo nací en el 78), pero por algunas joyas que he visto, ésta película no creo que represente lo mejor del cine de ésa época.

Gran calificación en los portales de recopilación de calificaciones, inmejorables calificaciones de profesionales y entusiastas críticas de cinéfilos aficionados parecían honrar una estupenda película digna de ver. ¡Que fiasco! Se cumple la premisa de que las grandes críticas no son infalibles.

No quiero perder mucho tiempo en escribir ésta crítica (ya me perdí dos horas y media de mi vida viendo éste fiasco)

No busquen exactitud histórica porque NO LA HAY. Si bien es cierto está basada en una historia real, se han omitido muchos episodios valiosos de la historia original y se han agregado elementos ficcionales de escasa ocurrencia y ayuda al guion.

El montaje por momentos es obsceno, lástima que no se puedan adjuntar imágenes aquí, pero la escena en que un preso es guillotinado es un derroche de vulgaridad, desde que el preso es trasladado zapateando e insultando en castellano, hasta el momento en que es guillotinado, cambiando así sin más la imagen del reo real por la cabeza de un muñeco visiblemente berreta al que no se esforzaron ni un tanto para hacer que se parezca al actor en cuestión.

El guion, que aparece reseñado como la octava maravilla del cine, no llega a las 5000 palabras pronunciadas en toda la película (4913 en la versión doblada al castellano), paupérrimo si estamos hablando de un metraje de 2:30 horas de duración. Hablar más no significa que sea mejor. Pero acá menos es también peor. La falta de diálogos y el abuso de monosílabos dejan lagunas de silencio que no aportan ni suspenso ni ningún otro recurso narrativo y que termina siendo tan soporífero como el aislamiento en solitario, que paradójicamente se caracteriza por el supuesto “silencio” dentro de sus muros.

La música tampoco rellena esos silencios para sobrellevar las dos horas y media, solo por momentos me di cuenta que aparecía en contadas situaciones y no destaca en lo absoluto. Otro ítem sobrevalorado por la crítica.

Las actuaciones son de pacotilla, para nada memorables. Los secundarios son de medio pelo para abajo, mientras que de la dupla protagónica, solo salva la ropa Steve McQueen. Dustin Hoffman sobreactúa de tal forma que su papel nunca me resultó creíble, sus movimientos torpes y exagerados parecían más destinados a una película muda que a lo que requería su personaje.

Con todo lo dicho, en lo personal, se me hace imposible argüir una buena crítica al director. Francamente son muchos los errores y en varios puntos cruciales para una producción de éste tipo, me queda la sensación de que el director no se ha tomado muy en serio su labor aquí.

En fin, poco compromiso con la historia real, flojas actuaciones, diálogos mezquinos, guion poco desarrollado, escenas inútiles y una duración innecesaria = PAPELON. Película prescindible y fácilmente olvidable.

Ah, casi lo olvidaba, Steve McQueen hace lo que sabe en éste laaaaargometraje. De lo poco rescatable de la película. Punto para él.

Sobre el crítico Daniel D'Addario de Variety, resaltar que en su crítica completa reconoce no haber visto toda la serie, lo cual no impide que muy suelto de cuerpo se despache con una agria frase que me ha divertido: "Esta nueva serie busca credibilidad apoyándose en cosas repugnantes y exageradas y acaba fracasando a cada paso." Yo diría del señor D'Addario que "Este nuevo crítico busca credibilidad apoyándose en críticas repugnantes y exageradas y acaba fracasando a cada paso." Listo. A lo nuestro.

Ah sí, lo que ya se sabe: Distintas razas humanoides conviven entre sí en una metrópolis-refugio ambientada en la época victoriana. Dirigida a un público adulto por sus escenas eróticas (de las que tranquilamente pudo haber prescindido). Apadrinada en un principio por el mismísimo Guillermo Del Toro, en fin. Y sí, hay hadas. Hadas y “hados”.

Temáticas abordadas con menor o mayor suceso: Diversidad de género, política, romance, sexo, diferencias de clase, religión, esoterismo, inmigraciones, violencia y algún dejo detectivesco.

Me ha gustado mucho esta serie. No es la octava maravilla, eso está claro, pero tampoco es tan mala, predecible, repugnante y no sé qué más nos quieren hacer creer aquellos que, oportunamente, la comparan con “Games of Thrones” con el simple fin de bajarle el precio. Cualquiera que tenga cierta sensibilidad cinéfila, sabe muy bien que, a pesar de ciertas similitudes (tono fantástico, temáticas abordadas), son dos productos completamente diferentes.

El tufillo de la diversidad de género que impregna la serie, quizás distorsione levemente la historia original y contribuya a restarle seriedad al abordaje dramático. ¿Es el precio a pagar en los tiempos que corren para poder vender mejor el producto? Es muy probable. Es un dato a tener en cuenta. A los progresistas les va a encantar.

Y repito, me ha gustado mucho esta serie. El ejercicio de estilo está perfectamente ejecutado. Los efectos especiales no son tan maravillosos como algunos cuentan, pero están súper bien, hechos a la medida, más hubiera restado realismo. El suspenso o suspense está muy bien también, su progresión es bastante ajustada a la métrica de la serie, es cierto que algunas intrigas se dejan entrever, pero nunca es totalmente previsible. Las sub-tramas, están muy bien también y aportan coherencia, nada de eso de que “mucho abarca y poco aprieta”, las sub-tramas, son eso: “SUB”, son historias complementarias, y si algunos quieren más profundidad, pues que junten firmas para un spin-off.

¿Mencione ya que me ha gustado mucho esta serie? Por si me lo he olvidado, ¡Me ha encanado! Si te sientas a verla con cariño, como yo lo he hecho pasado capítulo y medio, la serie te devolverá mucha calidad en los detalles y momentos de cine realmente emotivos. Hay tal prolijidad en el hilvanado de los componentes de una producción televisiva, que deja un muy buen sabor de boca. Hablo del trabajo del set de filmación, del trabajo técnico que, sin menospreciar los colores, reduce su rango desaturando para lograr su particular estética, y del trabajo de actores secundarios que, con sus performances, muy distinguibles y, por lo tanto, muy bien realizadas, elevan el todo. Hay un muy buen trabajo general de casting, y eso es fundamental. Da la impresión de que aquí no sobra nada, pero lejos de ser un defecto, celebro la justeza del conjunto que da como resultado un trabajo redondo.

Cara Delevigne, como el hada que se da cuenta que la vida no es un cuento de hadas, aporta belleza a la coprotagonista y el desenfado que precisa su personaje, sobre todo en los momentos de enfado, pero matiza bastante bien el costado emocional del mismo. En lo personal no me ha convencido del todo, pero me ha gustado. Capítulo aparte para Orlando Bloom, que compone muy bien a un personaje contrariado, rudo y vulnerable a la vez. El actor hace un trabajo de gesticulación que le da un plus de expresión a su personaje, al que ya de por si le imprime una correctísima postura que le otorga mucha credibilidad.

El variopinto que hay tras las cámaras ciertamente le da matices a la serie, en lo particular me gustó mucho el trabajo que hizo Andy Goddard en el quinto capítulo, pero el nivel es muy parejo. Bueno, muy bueno.

En resumen, es una muy buena serie del género fantástico en tono de drama con una interesante historia de amor, que se eleva cuando abre las alas emocionales. Muy bien gestionada por todo el espectro de producción y con un abanico actoral de excelente ejercicio. Muy recomendable. Para mí es un 7½.

O eso dicen, no estuve en el rodaje, pero a juzgar por lo visto, parece despachada en pocos días. No necesitaba mucho más tampoco. ¿Porqué?

Y, básicamente porque si tienes a un Sbaraglia encendido y a una top del Stand Up como Pichot, al resto no les queda más que seguirlos para que todo cierre enseguida. Y aclarar que el “resto”, Grinszpan y Lucero, no son cualquiera, y acompañan con prestancia. Pareciera que nada podría salir mal. Peeero…

Y acá va lo que para mí le baja la nota a esta producción. Algunas transiciones algo toscas entre escenas, desnudan algunas carencias del guion, que no son muchas ni terribles, pero se notan. ¿Pichot & Co. lo habrán escrito en un finde? La premisa es demasiado básica y las intrigas planteadas para sostener el supuesto “terror” se diluyen tan rápido que aquí es donde me cuestiono la categorización de la cinta. Yo nunca pude percibir atisbos de terror alguno. En todo caso, sería algo así como una comedia de humor negro con algo de suspenso (o suspense) y de crítica social, ésta última, remarcada con clase en las líneas oportunas por Sbaraglia (Lo de la amistad, quedó claro, ¿No?). Y no mucho mas de negativo.

Yendo a lo bueno, hay que decir que, como comedia, nunca me arrancó una carcajada, pero me mantuvo todo el rato con una sonrisa. El camaleónico y carismático Leonardo Sbaraglia, es casi la figura dentro de los 5 personajes clave de esta historia que son interpretados por 4 actores, la película gana mucha altura gracias a su intervención y es clave para sostenerla. Resuelve con gran solvencia interpretativa a su personaje y se lo desayuna en una sentada. Esto sin desmerecer a Pichot, que entrega una actuación algo teatralizada con innegables referencias al Stand Up, pero ojo, lo hace con la soltura y naturalidad con la que va a hacer las compras al súper. Como co-escritora del guion, está intrínsecamente dentro de la historia y se mueve dentro de ella como pez en el agua. Y eso se nota en la estructura general de la película logrando que el desarrollo de la historia gane mucho ritmo. Lucero cumple muy bien su rol de dupla de Pichot, dándole a la pareja una cadencia bastante dinámica. El total del montaje no supera los 80 minutos.

Grinszpan quizás sea la que más justifica el rótulo de terror con su interpretación, dotando a su personaje de un perfil frío y escalofriantemente apacible. Más en Spoiler.

El guion de Pichot es original, aunque un poco básico, pero con los añadidos suficientes y necesarios para ser interesante. ¿Es auto referencial? Un poco. ¿Es una auto parodia? Bastante. ¿Es auto consiente? Muchísimo. Y ahí está el mérito, nada más y nada menos.

Sin pedirle más de lo que tiene para dar, habida cuenta de su presupuesto y tiempo de rodaje, la película es muy buena. Para mí es un 7 redondito.