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Voto de Macarrones:
6
4,4
257
Drama
Entre el comienzo de una llegada y el final de una despedida, 'El dios de madera' cuenta una doble pasión amorosa y un descubrimiento, enmarcados sobre el fondo de la emigración ilegal. Yao, el muchacho senegalés que vende en la calle, es de religión animista, Rachid, el antiguo socorrista marroquí ahora peluquero por necesidad, musulmán, y junto a ellos están María Luisa, una viuda madura que aún sigue yendo a misa sin olvidar su ... [+]
16 de febrero de 2016
10 de 10 usuarios han encontrado esta crítica útil
Molina Foix no lo reconocerá, pero yo he visto en esta película un remake apenas disimulado de «Marcelino, pan y vino». En vez de Pablito Calvo, aquí el desheredado acogido por una comunidad masculina (de gais) es un senegalés de terso pandero, tan indefenso como un niño. Hay también, igual que en «Marcelino», un desván al que no se puede entrar, donde se esconde algo secreto que finalmente supondrá la aparente reconciliación del niño (en este caso, del senegalés) con la figura femenina ausente. En esta película se va mucho a misa y la autoridad del Estado (la municipal en «Marcelino», la policial en la de VMF) está representada de forma torva y negativa. Y «el dios de madera» al que alude el título, evidentemente, se refiere al crucifijo, al que se asimila con el amuleto del africano.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
La película se sustenta sobre la gran belleza y el buen trabajo interpretativo de los actores masculinos principales. Marisa Paredes está bien, en su línea, aunque algunos de sus diálogos son forzados y resulta mejor cuando simplemente camina, mira, se mueve y no habla. El guión es un poco destartalado y tiene un trasfondo freudiano muy discutible. El paso del tiempo está muy mal conseguido: hay veces que no sabe si pasan horas o días entre una escena y otra. Casi todos los secundarios son geniales (la dueña de la pensión, el novio de Marisa Paredes, la amiga binguera). Hasta cierto momento de la película, todo lo que sucede es positivo, alegre, generoso. Según lo veía, pensaba que eso es una rareza en el cine (y quizá en la literatura y en la vida).