Entretenida y tierna película, con buenas vibraciones y un protagonista con mucho encanto. Buena cinematografía e interesantes trazos sobre la historia de Laos: los bombardeos, la tradición chamanista, la urbanización forzada, la explotación industrial...

Llena de color y de vida, nos cuenta la historia de un niño que de acuerdo con una maldición de su poblado, atrae la mala suerte y es culpado por las múltiples desgracias que ocurren a su alrededor. Pero todo mejorará cuando consiga cambiar las tornas y ayudar a su familia.

Recomendable si te apetece un mini-viaje por tierras desconocidas, de la mano de este niño astuto y lleno de vida. Y descubrir, indirectamente, la realidad de un país olvidado por la mayoría y cargado de dura historia. A mí me robó más de una sonrisa.