Tres escabrosas historias de terror con el denominador común de no tener reparos a la hora de mostrar todo tipo de barbaridades, que sin embargo perturban menos de lo esperado. Buscando cierto punto de originalidad en cada una, la precipitación en las dos primeras y la reiteración en la última, hacen de todas ellas un cansino intento de algo más aterrador que se pierde en su retorcido universo, aburriendo en multitud de ocasiones. Con actuaciones mediocres y técnicamente aceptable, no es recomendable ni para entretenerse un rato viendo una película de miedo, ni para disfrutar de un poco de buen gore.

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