Haz click aquí para copiar la URL
Argentina Argentina · Moreno
Voto de Dr_Lemon:
8
Drama El 30 de diciembre de 1999 se encuentran a comer un asado siete amigos (más un invitado sorpresa) en la terraza de Tito, el anfitrión. La reunión se prolonga hasta las primeras horas del último día del fin del milenio. (FILMAFFINITY)
9 de diciembre de 2012
5 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Los siete amigos que vemos en este film tienen algo en común. Nacieron entre las décadas del 60/70. Llegado el día del rodaje, en 1999, ya varios pelan canas, arrugas, miradas de desencanto y un considerable camino andado por sus respectivas vidas. Ése será precisamente el eje de este film: lo que no podemos ver de estos personajes afuera de la terraza será lo que marcará a fuego la narración que transcurre en la misma. Ese aire invisible, y a la vez inconfundible, de decadencia y melancolía, que traza un retrato sobrio y a la vez contundente sobre la resignación ante la vida, la que les tocó vivir por la etapa que atravesaron y la que se negaron a enfrentar por sus propios miedos o limitaciones.
Digo esto porque desde el vamos éstos mismos personajes se encargan de recordarnos que transitaron su juventud durante la etapa más nefasta de la historia reciente de nuestro país. Entonces el resentimiento aflorará de un momento a otro y oficiará de disparador, quebrantando el aire distendido con el que se nos presenta este entramado. Y el rencor sobre las cosas que no dicen en voz alta pero que no dejan de estar presentes terminará por abrazar al film hasta el instante final, cuando el último velo termine por caer.
Antes de eso asistimos a una comedia sobre la resignación. Todos estos hombres muestran un dejo inconfundible de “hasta acá llegamos”. Acá se pueden encontrar dosis de un humor bien negro, no sobre dramas tomados de culebrones empalagosos, sino sobre un drama cotidiano que podemos ver en mucha gente a nuestro alrededor: el drama de personas que no supieron qué hacer con sus vidas, que ven que ésta se les escapa de las manos y que no saben, no quieren, o no pueden, pensar en cómo aprovechar lo que les queda. Todos parecen entregados a que venga lo que tenga que venir, sin plantearse algún retruque, algún desafío, algo que pueda torcer una vida que no los ha dejado satisfechos y que no parece mejorar prontamente. Los diálogos más triviales, miren ustedes, son los que aportan la mirada más sardónica sobre esta decadencia.
Más irónico todavía es llegar hasta el final y notar que los personajes hablan del fin del mundo. Lo que está por venir. Sobre todo porque hoy, varios años después, podemos notar que lo que estaba por venir era un nuevo golpe desgarrador. Oímos a uno de los personajes decir: “Se viene el fin del mundo… me gustaría que pasara algo. Hace mucho tiempo que en este país no pasa algo que nos conmueva”. Esta frase fue pronunciada el 31 de diciembre de 1999, dos años antes de que se desatara la peor crisis económica que azotara a nuestro país.
Dr_Lemon
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow