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Voto de Archilupo:
7
Comedia Falso documental sobre Leonard Zelig, el hombre camaleón que asombró a la sociedad norteamericana de la 'era del jazz'. Su historia arranca el día que miente al afirmar que ha leído Moby Dick, sólo para no sentirse excluido. Desde entonces, su necesidad de ser aceptado lo lleva a transformarse físicamente en las personas que lo rodean, convirtiéndose así en un fenómeno mediático, en una celebridad sin esencia. Testigo de algunos de los ... [+]
13 de febrero de 2009
71 de 75 usuarios han encontrado esta crítica útil
Woody Allen parte de una gran idea, potente como un arquetipo: la del hombre camaleónico, que carece de personalidad propia y adopta las de los circundantes. Responde a una tendencia a mimetizarse que, en mayor o menor medida, todos poseemos. Y para desarrollarla, prepara un gran dispositivo formal. Apura las posibilidades técnicas del falso documental como si, en un alarde a lo Zelig, Allen se transformara en un cineasta de escuela soviética. Reúne todo lo necesario para lograr verosimilitud y toque de época: textura vieja de películas, testimonios grabados, imágenes de noticiarios, reales y trucadas; carteleras, periódicos, entrevistas a científicos, juegos y anuncios. Todo. Ese toque está plenamente conseguido, con brillantez, y da muy alta calidad visual al film. Por otra parte, la distancia que establece frente al relato es más bien fría, aunque no se entretiene sólo en gags y emplea un corrosivo sentido de la parodia.

Una vez establecida la distancia, lo esperable sería el desarrollo de lo preparado; incrementar la temperatura y meterse en harina narrativa. Pero la distancia vuelve a establecerse, una y otra vez. La película entra en un bucle desconcertante y ahí se mantiene, en la demasiado enfática exhibición del virtuoso montaje, algo que ya hemos admirado durante la prolija y entretenida presentación del personaje y sus prometedoras características.

La duda puede acompañar al espectador durante "Zelig": la distancia está muy conseguida pero, ¿es la idónea para hacer divertida la peripecia del personaje, una vez presentado, o para profundizar en ese portentoso don de cambiar de apariencia a ojos vista?
Una respuesta posible: no hay fondo donde profundizar porque la forma se ha estirado y estirado y lo ha traído todo a la superficie, donde se hilvanan las escenas sueltas, varias de ellas notables, eso sí.
Archilupo
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