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Voto de VALDEMAR:
4
7,9
109.514
Drama. Fantástico
Ambientada en el sur de los Estados Unidos, en plena Depresión. Paul Edgecomb es un funcionario de prisiones encargado de vigilar la "Milla Verde", un pasillo que separa las celdas de los reclusos condenados a la silla eléctrica. John Coffey, un gigantesco hombre negro acusado de asesinar brutalmente a dos hermanas de nueve años, está esperando su inminente ejecución. Tras una personalidad ingenua e infantil, Coffey esconde un ... [+]
11 de marzo de 2009
59 de 117 usuarios han encontrado esta crítica útil
No sé contar cuánta gente me había recomendado que viera esta película. Entre eso y los antecedentes, mi predisposición a disfrutarla era total. Pero vaya, ¡qué decepción!
Darabont repite drama carcelario y autor del mismo, pero lo que no repite, ni de lejos, es el resultado, impecable en CADENA PERPETUA, decepcionante en LA MILLA VERDE.
Para contar un relato fantástico tienes que medir mucho la puesta en escena, ya que corres el riesgo de rozar el ridículo. Aquí el ridículo se roza unas veces y se pasa, de largo, en otras (spoiler). También se pasa de largo el metraje, pesadito pesadito. Los personajes son inconsistentes. Tom Hanks me parece sobreactuado (las infecciones de orina duelen... pero no tanto)
Los buenos son muy buenos y los malos malísimos. El planteamiento de la historia es absurdamente infantil. Pero infantil del tipo de las escritas por un adulto chiflado y cabrón de esos que gustan de asustar a los niños (Stephen King, por ejemplo) Se entrelazan escenas de un buenismo empalagoso con otras de una crueldad salvaje, no sabemos con objeto de qué. También hay un numeroso surtido de escenitas sensibleras de las que dan llorona a los más indefensos miembros del respetable.
Los buenos, como son tan buenos, pueden asesinar impunemente a los malos, que son escoria y se lo merecen. De hecho, por quitarlos de enmedio se les respeta y se les quiere. Todo la peli destila cierto tufillo a fariseísmo asquerosete.
Aunque también tiene momentos de una sobriedad lúcida y muy agradecible. El conjunto de la película no está del todo mal, básicamente por un elemento: el ratón. Es el mejor personaje y el único al que no podemos juzgar moralmente ni tiene un texto estúpido que nos haga pensar que la película es ridícula.
Darabont repite drama carcelario y autor del mismo, pero lo que no repite, ni de lejos, es el resultado, impecable en CADENA PERPETUA, decepcionante en LA MILLA VERDE.
Para contar un relato fantástico tienes que medir mucho la puesta en escena, ya que corres el riesgo de rozar el ridículo. Aquí el ridículo se roza unas veces y se pasa, de largo, en otras (spoiler). También se pasa de largo el metraje, pesadito pesadito. Los personajes son inconsistentes. Tom Hanks me parece sobreactuado (las infecciones de orina duelen... pero no tanto)
Los buenos son muy buenos y los malos malísimos. El planteamiento de la historia es absurdamente infantil. Pero infantil del tipo de las escritas por un adulto chiflado y cabrón de esos que gustan de asustar a los niños (Stephen King, por ejemplo) Se entrelazan escenas de un buenismo empalagoso con otras de una crueldad salvaje, no sabemos con objeto de qué. También hay un numeroso surtido de escenitas sensibleras de las que dan llorona a los más indefensos miembros del respetable.
Los buenos, como son tan buenos, pueden asesinar impunemente a los malos, que son escoria y se lo merecen. De hecho, por quitarlos de enmedio se les respeta y se les quiere. Todo la peli destila cierto tufillo a fariseísmo asquerosete.
Aunque también tiene momentos de una sobriedad lúcida y muy agradecible. El conjunto de la película no está del todo mal, básicamente por un elemento: el ratón. Es el mejor personaje y el único al que no podemos juzgar moralmente ni tiene un texto estúpido que nos haga pensar que la película es ridícula.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
Pero como digo, una cosa es lo fantástico y otra lo ridículo:
-El negrazo este sólo sabe hacer pucheros y decir "ese hombre es muy malo". No entiendo qué necesidad había de que este personaje fuese subnormal... ah sí, la santidad de la inocencia. Pero este tío se carga a un hombre y deja a otro oligofrénico perdido... pero eran los malos... sigue siendo un santo varón. Y aunque friamos a todos los demás sin despeinarnos, porque es nuestro trabajo, con éste (que es el único del que nos consta su crimen porque lo ha cometido delante de nuestras narices) vamos a hacer una excepción y vamos a llorar a moco tendido todos, que era un tipo estupendo.
-La secuencia de la cura a la mujer del tumor cerebral. Impresionante. Primero por el maquillaje de la señora, cuando llegan tiene unas ojeras y una pinta desconocida en la naturaleza, y cuando la sana, de repente, tiene la sombra de ojos divinamente pintada, lleva colorete y los labios rosa-primavera. Y tú piensas que el negrazo es una maravilla, no sólo extirpa tumores si no que también es estilista. Segundo, por que cuando llegan a la casa, la mujer está pegando respingos sobre la cama y diciendo lindezas del calibre "sois todos unos chupapollas", que más que un tumor cerebral, parece que tengan ahí a la niña del exorcista. Total, que la secuencia esta no puede ser más ridícula.
-Y los dos malos malísimos.... demasiao. El carcelero, de libro, completamente cabrón y pusilánime. El encarcelado, de tebeo. Y además, ya es casualidad, coño. En un corredor de la muerte donde sólo hay dos reclusos, uno sea inocente y el otro el que cometió el crimen que se le imputa al inocente. Vaya historia.
-El negrazo este sólo sabe hacer pucheros y decir "ese hombre es muy malo". No entiendo qué necesidad había de que este personaje fuese subnormal... ah sí, la santidad de la inocencia. Pero este tío se carga a un hombre y deja a otro oligofrénico perdido... pero eran los malos... sigue siendo un santo varón. Y aunque friamos a todos los demás sin despeinarnos, porque es nuestro trabajo, con éste (que es el único del que nos consta su crimen porque lo ha cometido delante de nuestras narices) vamos a hacer una excepción y vamos a llorar a moco tendido todos, que era un tipo estupendo.
-La secuencia de la cura a la mujer del tumor cerebral. Impresionante. Primero por el maquillaje de la señora, cuando llegan tiene unas ojeras y una pinta desconocida en la naturaleza, y cuando la sana, de repente, tiene la sombra de ojos divinamente pintada, lleva colorete y los labios rosa-primavera. Y tú piensas que el negrazo es una maravilla, no sólo extirpa tumores si no que también es estilista. Segundo, por que cuando llegan a la casa, la mujer está pegando respingos sobre la cama y diciendo lindezas del calibre "sois todos unos chupapollas", que más que un tumor cerebral, parece que tengan ahí a la niña del exorcista. Total, que la secuencia esta no puede ser más ridícula.
-Y los dos malos malísimos.... demasiao. El carcelero, de libro, completamente cabrón y pusilánime. El encarcelado, de tebeo. Y además, ya es casualidad, coño. En un corredor de la muerte donde sólo hay dos reclusos, uno sea inocente y el otro el que cometió el crimen que se le imputa al inocente. Vaya historia.