Media votos
3,8
Votos
7.925
Críticas
231
Listas
0
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Mis críticas favoritas
- Contacto
-
Compartir su perfil
Voto de Jark Prongo:
8
6,7
258
Drama
Clara y Hans, dos terroristas de izquierdas, huyen de la policía desde hace quince años. Cuando su hija Jeanne, una adolescente cada vez más rebelde, se enamora de un muchacho desconocido, se convierte en una amenaza más para la seguridad de sus padres. (FILMAFFINITY)
17 de mayo de 2012
13 de 19 usuarios han encontrado esta crítica útil
El debút en largo fuera de las TV Movies de Christian Petzold resultó ser un interesantísimo estudio a múltiples niveles de la sociedad germana en torno a sus 3 principales entidades (individuo, familia, Estado). Un estudio de gramática visual sobria, distante y precisa; de abogar más por apelar a la inteligencia del espectador que de proporcionarle una serie de respuestas (seria tan hipócrita como lo que critica de obrar así); de diseccionar la adolescencia femenina sin maniqueísmos ni mierdas; de, sobre todo, lo importante que es NO OLVIDAR (esto se evidencia con la proyección dentro de la película del gran documental de Resnais ¨Noche Y Niebla¨, elección nada gratuita o aleatoria). Y, ya de paso, nos insinua que la historia ha de ser cuestionada para sacar algo en claro. Valiosa lección.
Tomando como base la muerte de Wolgang Grams (miembro de las Baader Meinhof muerto durante un tiroteo de torpe y bizarro tropiezo aka asesinado por el Estado Alemán) y sus anhelos en vida de conseguir una existencia lo más próxima a lo que consideramos normal dentro de la clandestinidad, Petzold añade a la pareja en constante fuga la figura de una hija quinceañera, y esto le da pie a obtener una muñeca rusa de reflexiones sobre la opresión (el Estado sobre los padres, los padres sobre la hija) y otro contexto sobre la rebelión (la de toda adolescente enamorada sobre sus progenitores). Porque a la niña se le hace el chocho pesicola con un pelos fan de Brian Wilson, y en ella se dan unas contradicciones (las propias de esa edad tan confusa) que hacen peligrar toda una vida de sigilo, sensatez, discrección y hacer guardias para velar por el sueño del resto de la familia. Claro que, también sucede que por ser ella una hija de fugitivos, se da la paradoja de no poder huir de la familia pese a estar dicha célula en constante evasión. El clásico soltar 4 voces en casa diciendo cosas muy feas para irte a dar un paseo, echar un cigar, calmarte, volver y todos tan haminjos, sin convertir eso en un baño de sangre de esta manera.
Tomando como base la muerte de Wolgang Grams (miembro de las Baader Meinhof muerto durante un tiroteo de torpe y bizarro tropiezo aka asesinado por el Estado Alemán) y sus anhelos en vida de conseguir una existencia lo más próxima a lo que consideramos normal dentro de la clandestinidad, Petzold añade a la pareja en constante fuga la figura de una hija quinceañera, y esto le da pie a obtener una muñeca rusa de reflexiones sobre la opresión (el Estado sobre los padres, los padres sobre la hija) y otro contexto sobre la rebelión (la de toda adolescente enamorada sobre sus progenitores). Porque a la niña se le hace el chocho pesicola con un pelos fan de Brian Wilson, y en ella se dan unas contradicciones (las propias de esa edad tan confusa) que hacen peligrar toda una vida de sigilo, sensatez, discrección y hacer guardias para velar por el sueño del resto de la familia. Claro que, también sucede que por ser ella una hija de fugitivos, se da la paradoja de no poder huir de la familia pese a estar dicha célula en constante evasión. El clásico soltar 4 voces en casa diciendo cosas muy feas para irte a dar un paseo, echar un cigar, calmarte, volver y todos tan haminjos, sin convertir eso en un baño de sangre de esta manera.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
Es sobresaliente como juega Petzold con la paranoia y la sensación de constante persecución/riesgo de ser apresados que (suponemos) tienen los protagonistas. A ese respecto, la escena del semáforo en rojo (en un terreno cuasi despejado, intersección de 4 carreteras) es lo mejor que he visto en mi estúpida vida, tanto por planificación como resolución... e igual porque al final de la película el muy hijo de puta nos deja caer que lo mismo en ese momento concreto, si sospechaban como sospecharon (pese a la aparente disposición casual de los coches, todos BMW, como mero fruto del azar) es porque pasa algo: en una recta, varios BMW sitian el coche de la familia protagonista y provocan un accidente (el cual suponemos mortal para los padres). La joven sobrevive, y en ese hermosísimo plano final descubrimos que, uno, eres libre cuando tus padres doblan el gorro, y dos, que el Estado, si te quiere quitar de en medio, lo hará. A este nivel de compromiso, ese ¨ahí lo dejo¨ jodido, no llegaba la película que precisamente si debería haber llegado por ser en gran medida la crónica completa de todo el tinglado de El Ejército Rojo, El Otoño Alemán y demás, Der Baader Meinhof Komplex. Aunque esa era la versión oficial, ya me entendéis.