Iba al cine con ganas de ver esta película como historiador, porque su tema me cogía bastante cerca de las cosas en las que trabajo cada día. E iba con la idea de ver el film sin prejuicios, tratando de analizar objetivamente su recreación histórica... pero ya antes de empezar me había dado cuenta de que eso sería imposible, de que por más que quiera tengo multitud de condicionantes que me van a afectar (mi hartura de tanto maniqueísmo en las películas con la Guerra Civil o el Franquismo como telón de fondo, mi opinión sobre el Opus Dei, la aprobación que desde esta institución se hizo a la película, algunas críticas que había leído, mi propia concepción sobre la Guerra Civil pese a mi apoliticismo...). Y si esto me pasaba a mí, imagínense a otros sectores... por ejemplo había en el cine como cuatro filas de gente del Opus Dei, que aplaudieron incondicionalmente al unísono al final de la película, que seguramente hubiesen hecho lo mismo aunque el largometraje tuviese la mitad de calidad fílmica, y le pondrían un 10 sin dudarlo; también me imagino un buen lote de puntuaciones de "uno" dados por gente que no había visto la película pero que leyó el nombre de Escribá y que lo dejaban en buen lugar... en fin, que siendo español es difícil ver esta película sin algún tipo de influencia que dificulta analizarla.

Con todo, si intento abstraerme de cosas como que la figura de Escribá sale demasiado ensalzada o que el análisis de la realidad española de la época que cubre es bastante sesgado, me encuentro con una película bien contada, con un guión coherente aunque para nada impresionante, unas actuaciones en general aceptablesl y una ambientación más que correcta, aspectos que componen una interesante película, de lo mejor que se puede ver con la Guerra Civil como telón de fondo, y sin apenas maniqueísmos, aunque demasiado positiva con una figura cuando menos controvertida (y eso que Joffe es un judío agnóstico, pues menos mal). Tiene una evidente falta de ritmo en algunas partes, no termina de enganchar y podía haber sido mucho más profunda en su aproximación a la España de la II República o la Guerra Civil, pero es una película con las suficientes cosas buenas para que valga la pena interesarse por ella.

Eso sí, para los que digan que está al nivel de las dos grandes películas de Joffe (Los gritos del silencio y La misión), en mi opinión está un par de peldaños por debajo de ambas, aunque se atisba bastante más del talento escondido de este hombre que en cualquiera de sus últimas películas.