En este buen caso de Poirot, de un metraje de 50 minutos, aparecen juntos como siempre, Poirot, Hasting, Japp y Miss Lemon, en un episodio de lujo, con unos coches de época realmente admirables, y con un vestuario realmente muy acertado. Nuestro capitán Hasting, con la ayuda solapada de Poirot, tendrá que descifrar y resolver, una intrincada y bien planificada estafa. Es un caso que esconde un original y sencillo desenlace.
Este es un capitulo que esta un poco por debajo del nivel, de todos los de esta buenísima serie de casos del genial detective. En general es una buena serie, incluso notable en muchos aspectos con un David Suchet en estado de gracia en su papel de Poirot.
La ambientación de este episodio es francamente impecable, tanto en los exteriores e interiores, en los decorados, en el vestuario, y con la elegancia y la educación típicamente británica que desprenden todos los personajes, todo ello de una gran calidad.
Resumiendo: Perfecta para una tarde o noche para disfrutarla sin prisas, un 6 merecido.