Es la típica secuela, donde se cambia al director, el reparto enteramente, la música, fotografía e incluso al de catering, pero mantiene el nombre, y se le añade un número, en este caso el dos, y una coletilla atractiva que tenga que ver con rojo, negro y maldad, en este caso, "Sangre", un film con nombre atractivo y sugerente, pero hueco.

El guión se vuelve penoso, la acción deformada y demasiado juvenil, el terror se basa en litros de sirope de sangre, y por supuesto, no han olvidado el romance, juvenil y virginal, de unos adolescentes endebles, en pos de un santo grial contra un vampiro de centenares de años, fuerza, inteligencia y por supuesto con una vendetta personal, la de ver el sol, más típico que los episodios de los Fruittis.

En fin, yo la he visto, la verán los fans del género, los familiares y amigos de los actores, los de la productora y por supuesto, aquellos que necesiten una de miedo, una noche de indecisión, aún conociendo lo que les espera. Suerte.