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Drama. Musical
La calle arde, en una mañana cualquiera en una ciudad latinoamericana. La gente va saliendo de sus casas en autobús, en metro, en sus carros y sintonizan la radio. Allí, frente al micrófono y con su voz adiestrada: Cayetano Ruiz, quien invita al público a una batalla de hip-hop que tendrá lugar en la plaza central. Jorge (Emilio Vizcaino), un galancito de sociedad, popular y simpático junto a sus imparables amigos, con sus sueños de ... [+]
14 de agosto de 2012
3 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
No hay que ser un erudito ni un sabio Filosofo-Metafísico para darse cuenta que en la mayoría de las películas (por cierto, Norte Americanas y Europeas) a los latinos les dan los personajes que suelen llevar un arma en la mano, siempre me preguntaba ¿Porque?, ¿Para qué?, y la respuesta nos la damos nosotros mismos con películas como esta, donde sí o sí, tenemos que tratar temas de violencia, drogas, secuestros, pobreza y delincuencia en general. No digo que este mal reflejar esos temas en forma de cultura en algunas películas, y cuando digo algunas digo casi todas o las que más popularidad tuvieron, como por ejemplo: La virgen de los sicarios, Secuestro Express, Ciudad de dios, Huele-Pega, Amaneció de golpe, María llena eres de gracia, etcétera.
Y ahora nos llega directo de Caracas "Son de la calle" que como toda película venezolana que se aprecie tenía que tener de todo lo mencionado anteriormente. Pero esta vez con un toque cursi de telenovela de esas donde la madre de la protagonista es la señora de limpieza que abandono a su hija cuando nació por ser pobre, donde la mala está más buena que la protagonista (y suele quedar embarazada de su mejor amigo para chantajear al protagonista), donde el protagonista a pesar de que la mala lo tiene todo (cuando digo todo es TODO) prefiere a la chica humilde (ya saben para cambiar la rutina), y como no, la protagonista queda embarazada y la mala contrata al sicario de turno para que la mande a matar, o si está de buen humor ese día simplemente la tira por la escalera a ver si hay suerte y aborta.
La única pregunta que me ronda mi cabeza, que me atormenta y me puede dejar en coma es: ¿Había necesidad de hacer una película así? Totalmente carente de sentido, no hay complicidad entre el público y los personajes podía morirse el bueno, el malo o el perro y me daba lo mismo.
La trama...¿Que trama? las escenas no eran más que una sucesión de fotogramas con personas que repetían un guión de memoria, si en una escena de amor hubiera aparecido un camello hablando ni me hubiera inmutado, me hubiera parecido de lo más normal.
No puedo decir que esas personas que leían los guiones de memoria sobre-actuaron porque para sobre-actuar hay que actuar primero y ellos ni lo uno ni lo otro. Un ejemplo: Chino y Nacho cantantes de reggaetón-merengue-bachata-balada actuando uno de Hip Hop y otro de "saltamontes parkour". La protagonista menos personalidad que una ardilla, intentaba parecer que tenía carácter de mujer latina pero con los gritos que pegaba (sin razón) parecía más una histérica, de hecho me pregunte varias veces si estaba actuando o era así.
Y ahora nos llega directo de Caracas "Son de la calle" que como toda película venezolana que se aprecie tenía que tener de todo lo mencionado anteriormente. Pero esta vez con un toque cursi de telenovela de esas donde la madre de la protagonista es la señora de limpieza que abandono a su hija cuando nació por ser pobre, donde la mala está más buena que la protagonista (y suele quedar embarazada de su mejor amigo para chantajear al protagonista), donde el protagonista a pesar de que la mala lo tiene todo (cuando digo todo es TODO) prefiere a la chica humilde (ya saben para cambiar la rutina), y como no, la protagonista queda embarazada y la mala contrata al sicario de turno para que la mande a matar, o si está de buen humor ese día simplemente la tira por la escalera a ver si hay suerte y aborta.
La única pregunta que me ronda mi cabeza, que me atormenta y me puede dejar en coma es: ¿Había necesidad de hacer una película así? Totalmente carente de sentido, no hay complicidad entre el público y los personajes podía morirse el bueno, el malo o el perro y me daba lo mismo.
La trama...¿Que trama? las escenas no eran más que una sucesión de fotogramas con personas que repetían un guión de memoria, si en una escena de amor hubiera aparecido un camello hablando ni me hubiera inmutado, me hubiera parecido de lo más normal.
No puedo decir que esas personas que leían los guiones de memoria sobre-actuaron porque para sobre-actuar hay que actuar primero y ellos ni lo uno ni lo otro. Un ejemplo: Chino y Nacho cantantes de reggaetón-merengue-bachata-balada actuando uno de Hip Hop y otro de "saltamontes parkour". La protagonista menos personalidad que una ardilla, intentaba parecer que tenía carácter de mujer latina pero con los gritos que pegaba (sin razón) parecía más una histérica, de hecho me pregunte varias veces si estaba actuando o era así.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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