Tenía unas ganas enormes de ver el último trabajo de Clint Eastwood, porque le confirmé a un amigo cinéfilo que aquella afirmación de que sería la última película que actuase y filmase...no sería cierto y el tiempo me ha dado la razón.

Todos o por lo menos la mayoría de nosotros sabemos que es una mula, es la persona que transporta droga, ya sea en un medio de transporte o en su propio cuerpo, en ambos corre peligro en el segundo caso te juegas la vida. Pues arrancamos con esto.

Eastwood para mi gusto ha hecho una despedida con este film y se nota en muchos planos, sobretodo en los diálogos. Una despedida a través del personaje y la historia. Un hombre separado, que adora a su nieta, pero cuya hija no lo traga mucho después de una faena el día de su boda y su ex-mujer lo repudia al máximo, culpándolo de muchos fracasos en sus vidas.

Su posición económica no es nada boyante, al contrario y muchas de sus promesas se han quedado en el tintero, pasando de ser el patriarca familiar y respetado al pobre diablo que da pena. En una ocasión le proponen ganar dinero fácil por conducir y allí se va sin contemplaciones, lo que irá descubriendo poco a poco es que transporta droga y que cada vez sus emolumentos crecen considerablemente, proporcionando a sus más allegados cosas impensables hace más bien poco.

Eastwood es un magnífico contador de historias, aprovechando los primeros planos y en especial los diálogos. Se proyecta un personaje carismático, con personalidad y divertido, sin miedo a la vida, ya el contador camina hacia atrás y poco le importan las cosas.

A mi me ha encantado como se ha llevado el proceso de pertenecer a ese mundo, ya que tenía la curiosidad de como se podrían unir ambos mundos y más teniendo en cuenta la edad de nuestro protagonista, más de 85 años. Desde su perspectiva lo hace todo más atractivo. Quizás un personaje más joven no habría ganado tanto.

Bradley Cooper me ha sorprendido en ese papel de agente de la ley, y la pena el corto papel de Andy García.

Mula es la redención de un hombre que ha pasado mucho tiempo haciendo cosas menos importantes que las que debiera.