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Voto de Meldelen:
10
6,0
452
Fantástico
Cuenta la historia de un viejo en el lecho de muerte que recupera un sueño de la infancia en el que se niega a envejecer, y combate el envejecimiento con su imaginación. (FILMAFFINITY)
26 de julio de 2015
10 de 11 usuarios han encontrado esta crítica útil
Es increíble lo tremendamente infravalorada que está esta película y la poca divulgación que se le ha dado. Es un trabajo bellísimo y un canto poético a la vida y al amor por los seres queridos, además del amor a la música, por supuesto.
Supongo que mi opinión no será tenida muy en cuenta a partir del momento en que diga que soy fan de Nightwish, y lo he sido desde hace muchos años. Pero honestamente, por más que me guste el grupo, no le había dado una oportunidad a esta película antes de hoy, porque a mí lo que me gusta es la banda, la música que hacen y cómo la interpretan en directo. No les veía, francamente, ni como cineastas, ni mucho menos protagonizando una película que, además, tuviera de banda sonora sus propias creaciones y siguiera un guión escrito por el líder y compositor del grupo, Tuomas Holopainen. Simplemente, no les había dado ocasión a demostrarme que son capaces de llevar a la pantalla una historia bellísima que ha sido capaz de emocionarme hasta el llanto, y que, realmente, tiene poco que envidiarle al género de Tim Burton.
Creía que sería una especie de "paja mental" del compositor mezclado con videoclips de la banda a modo de musical. Me he equivocado totalmente, por fortuna.
La película funciona con alegorías y no viene mal conocer el estilo de la banda y la estética onírica de las películas de Burton para comprender mejor lo que se narra. La sinopsis que se hace en este espacio no le hace justicia: Thomas Withman es un compositor afectado de demencia senil, enemistado con su hija, que se encuentra en su lecho de muerte. A través de sueños confusos y pesadillas que mezclan su fértil imaginación con sucesos reales, reconstruye poco a poco su vida mientras lucha con la enfermedad que le ha destruido la mente y borrado todos los recuerdos para lograr un único propósito antes de morir: reconciliarse con su hija.
Bellísima y conmovedora. Si eres fan de Tim Burton, no te pierdas esta película.
Si eres fan de Nightwish, todavía menos. Pero esta película merece una oportunidad y no sólo, ni mucho menos, por la preciosa banda sonora. El mensaje ulterior que se transmite más allá de las visiones surrealistas de la película es tan antiguo y actual como la vida misma. Imprescindible.
No puede juzgarse por una sinopsis ni por un trailer. Hay que verla.
Nightwish, y Tuomas en particular, nos ha regalado una auténtica obra de arte.
Supongo que mi opinión no será tenida muy en cuenta a partir del momento en que diga que soy fan de Nightwish, y lo he sido desde hace muchos años. Pero honestamente, por más que me guste el grupo, no le había dado una oportunidad a esta película antes de hoy, porque a mí lo que me gusta es la banda, la música que hacen y cómo la interpretan en directo. No les veía, francamente, ni como cineastas, ni mucho menos protagonizando una película que, además, tuviera de banda sonora sus propias creaciones y siguiera un guión escrito por el líder y compositor del grupo, Tuomas Holopainen. Simplemente, no les había dado ocasión a demostrarme que son capaces de llevar a la pantalla una historia bellísima que ha sido capaz de emocionarme hasta el llanto, y que, realmente, tiene poco que envidiarle al género de Tim Burton.
Creía que sería una especie de "paja mental" del compositor mezclado con videoclips de la banda a modo de musical. Me he equivocado totalmente, por fortuna.
La película funciona con alegorías y no viene mal conocer el estilo de la banda y la estética onírica de las películas de Burton para comprender mejor lo que se narra. La sinopsis que se hace en este espacio no le hace justicia: Thomas Withman es un compositor afectado de demencia senil, enemistado con su hija, que se encuentra en su lecho de muerte. A través de sueños confusos y pesadillas que mezclan su fértil imaginación con sucesos reales, reconstruye poco a poco su vida mientras lucha con la enfermedad que le ha destruido la mente y borrado todos los recuerdos para lograr un único propósito antes de morir: reconciliarse con su hija.
Bellísima y conmovedora. Si eres fan de Tim Burton, no te pierdas esta película.
Si eres fan de Nightwish, todavía menos. Pero esta película merece una oportunidad y no sólo, ni mucho menos, por la preciosa banda sonora. El mensaje ulterior que se transmite más allá de las visiones surrealistas de la película es tan antiguo y actual como la vida misma. Imprescindible.
No puede juzgarse por una sinopsis ni por un trailer. Hay que verla.
Nightwish, y Tuomas en particular, nos ha regalado una auténtica obra de arte.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
En YouTube se resalta la escena del circo como una alegoría de la mente enferma de Thomas y sus recuerdos, confusos y semiborrados, que se van desvaneciendo poco a poco a causa de la demencia. Pero la escena que me parece irrepetible, magnífica, insuperable, es la del cuarto giratorio, donde se superponen dos terribles escenas pertenecientes a una misma vida, que cae en los mismos errores como un círculo vicioso: el niño contemplando el suicidio de su padre y la niña viendo cómo su padre, el mismo hombre ya adulto, destruye el juguete que tanto le gusta. Estremecedor.