Presidio es una modesta producción de terror que en su día fracasó pero que con los años se ha convertido en una respetable obra de culto. Fue el segundo trabajo de Renny Harlin como director y también uno de los primeros papeles de Viggo Mortensen en el cine. Destaca sobre todo por su conseguida atmósfera malsana y los efectos de maquillaje que también están muy logrados contribuyendo a reforzar el impacto de las secuencias más terroríficas. El veterano Lane Smith encarna al temible alcalde de la prisión y dado su particular físico de psicópata el papel le va que ni pintado.

La cinta ha soportado dignamente el paso del tiempo y todavía hoy se deja ver con agrado en especial si eres aficionado al género. El único reproche que le hago es que la historia es muy simple y no depara muchas sorpresas y cuando se alarga, por momentos se vuelve espesa y algo lenta pero por lo demás la recomiendo. Yo la tuve en vhs y ya entonces me llamó la atención, ahora que se edita en alta definición es un buen momento para revisarla. Y por cierto la película es de 1987.