"Qué hacer en caso de incendio" narra el reencuentro de seis amigos de juventud cuando ya rondan los 30 años. El detonante de esa reunión es una bomba que estalla en el año 2000, casi 20 años después de ser puesta. En la Alemania de los años 80, los seis amigos formaban un grupo anarquista revolucionario que luchaba en contra del capitalismo y las convenciones sociales, buscando en su filosofía de vida una vía de escape a la política del momento. Dos décadas más tarde sólo dos de ellos siguen con ese estilo de vida. Los demás se han convertido en productos del imperialismo y han olvidado las armas con las que luchaban. Una de esas armas es precisamente esa bomba casera que estalla cuando ninguno se lo espera. También grababan películas sobre sus acciones revolucionarias, así, existe una cinta en la que se explica cómo construir una bomba en casa. La policía ha requisado dicha cinta. Temerosos de que los reconozcan en el vídeo, deciden arreglárselas para recuperar la película. De este modo vuelven a coincidir los seis. Ya no son los mismos y entre ellos surgirán conflictos debido a las nuevas diferencias que los separan ahora.
"Qué hacer en caso de incendio" es interesante en cuanto a los temas que plantea: habla de un estilo de vida, del punto hasta el que puede llegar una amistad y de ideas políticas que se desvanecen con el paso de los años. En cambio, no es verosímil: los atajos de los protagonistas para conseguir la grabación son bastante simples y más propios de una cinta de acción en la que de antemano sabes que van a suceder cosas irreales. Por lo tanto, los acontecimientos y la tónica del film (realista, político, social) no van de la mano. Quizás con otro tratamiento y un guión un poco más original, podría ser un largometraje a la altura de "Los educadores" u otra cinta de este tipo; sin embargo, tal y como está hecha no es más que una película entretenida.