Haz click aquí para copiar la URL
España España · Barcelona
Voto de Eduardo:
6
Cine negro. Drama. Intriga El director de una gran librería comete un desliz con una empleada. Cuando ésta traba amistad con un ex presidiario ambos trazarán un plan para chantajearle.
1 de junio de 2015
5 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
Antes de adquirir fama como especialista en cine de terror, tras desenterrar a los grandes mitos de la Universal e insuflarles nueva vida, Terence Fisher era un probo artesano que aprendía el oficio durante los años 50 en la Hammer, período en el que alumbró algunas películas de intriga inéditas en España. En ésta, George Brent (de nuevo la jugada del actor norteamericano en decadencia trasplantado a Gran Bretaña para potenciar la comercialidad de la cinta) es un pacífico librero al que una de sus empleadas, estúpida y lúbrica, le tira los tejos... con segundas intenciones, mientras su secretaria (Marguerite Chapman, también procedente de la otra orilla del Atlántico) le ama en silencio. La putita es Diana Dors, que ya apuntaba boca obscena y turbiedades varias. Historia de chantajes y morbosas maniobras, Fisher se desenvuelve bien en la intriga, marcada por un villano sorprendentemente moderno por su falta de escrúpulos y un ritmo que va tomando velocidad a medida que avanza la trama, todo ello aderezado con un B/N impecable, siempre al servicio de lo que se desea transmitir al espectador. Sorprende la lozanía de la ambientación, y aunque incurra en alguna ingenuidad las virtudes se sobreponen sin problemas a los defectos. es patente la diferencia entre el thriller estadounidense y el cine policial británico, pulcro, elegante, pero implacable en ocasiones. Un must para los amantes de Terence Fisher, y para los forofos del cine negro en general.
Eduardo
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow