Media votos
6,7
Votos
5.206
Críticas
1.665
Listas
182
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Mis críticas favoritas
- Contacto
-
Compartir su perfil
Voto de Miquel:
8
6,9
677
Drama
Sam Tucker, un esforzado jornalero del algodón que sueña con un futuro mejor para su familia, consigue tener su propia plantación, pero habrá de enfrentarse a un clima implacable, a una inesperada enfermedad y a la hostilidad de sus vecinos. (FILMAFFINITY)
23 de febrero de 2010
16 de 17 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tercer largometraje de los cinco que Jean Renoir realiza en EEUU. El guión, del propio Renoir, desarrolla la adaptación escrita por Hugo Butler de la novela “Hold Autumn in Your Hand” (1941), de George Sessions Perry. El guión contiene algunas intervenciones de dos reconocidos escritores del sur de EEUU, William Faulkner y Nunnally Johnson, no acreditados. Se rueda con un bajo presupuesto en escenarios naturales y en pleno campo, salvo breves tomas filmadas en los platós de General Service Studios (Hollywood). Es nominado a 3 Oscar (director, música y sonido). Producido por David Loew y Robert Hakim para United Artists, se estrena el 30-IV-1945 (EEUU).
La acción dramática tiene lugar en la localidad algodonera de San Pedro (Texas), próxima al río San Joaquín, a lo largo de un año (1938 o 1939) de la Gran Depresión. El jornalero Sam Tucker (Scott), su esposa Nana (Field) y sus hijos Daisy y Jotty (Gilpin), conviven con la abuela paterna de Sam (Bondi) y el hermano del padre, el tío Pete (Burns). Tras el fallecimiento de éste, deciden alquilar una finca de 27 Ha. para trabajar por cuenta propia y cultivar sus propias cosechas. Sam es inteligente, consciente, resuelto y bondadoso. Nana es sufrida, laboriosa y cariñosa. La abuela es gruñona.
El film desarrolla un drama rural y familiar, que suma realismo y humor, de acuerdo con las constantes de Renoir. El realismo sirve para construir un emotivo retrato de la pobreza y precariedad de recursos de los arrendatarios, aparceros y pequeños propietarios de tierras de cultivo en los años de la Gran Depresión. Se ven sometidos a las inclemencias del tiempo, la escasez de alimentos y abrigo, pérdidas de cosechas a causa de tempestades e inundaciones, la insolidaridad de los vecinos, precios bajos de venta a los mayoristas y elevados costes de las materias primas y bienes intermedios (productos fitosanitarios, extinción de plagas...), jornadas prolongadas de trabajo desde el alba hasta el anochecer, tareas que requieren esfuerzo físico, enfermedades específicas, como la pelagra, enfermedad de primavera o escorbuto, que afecta a Jotty, y otras calamidades. Compone un retrato veraz y entrañable, de trazos cálidos, cargados de sentido humanista y de interés por el ser humano.
El humor, abundante y festivo, se apoya en lances de la acción y, sobre todo, en personajes caricaturescos, como los de Beulah Bondi (la abuela) y Norman Lloyd, o ariscos y malhumorados, como los del vecino Devers (Naish) y su sobrino Finlay (Lloyd). Explica cómo se reflejan en las tareas agrícolas las estaciones del año, con una etapa invernal sin rendimientos, que se ha de dedicar a la pesca y a la caza, en espera de los primeros frutos de la primavera. Las penurias del invierno se ejemplifican con la pesca del barbo (pez comestible de río poco estimado) y la caza de la zarigüeya (pequeño marsupial propio del Continente americano).
La acción dramática tiene lugar en la localidad algodonera de San Pedro (Texas), próxima al río San Joaquín, a lo largo de un año (1938 o 1939) de la Gran Depresión. El jornalero Sam Tucker (Scott), su esposa Nana (Field) y sus hijos Daisy y Jotty (Gilpin), conviven con la abuela paterna de Sam (Bondi) y el hermano del padre, el tío Pete (Burns). Tras el fallecimiento de éste, deciden alquilar una finca de 27 Ha. para trabajar por cuenta propia y cultivar sus propias cosechas. Sam es inteligente, consciente, resuelto y bondadoso. Nana es sufrida, laboriosa y cariñosa. La abuela es gruñona.
El film desarrolla un drama rural y familiar, que suma realismo y humor, de acuerdo con las constantes de Renoir. El realismo sirve para construir un emotivo retrato de la pobreza y precariedad de recursos de los arrendatarios, aparceros y pequeños propietarios de tierras de cultivo en los años de la Gran Depresión. Se ven sometidos a las inclemencias del tiempo, la escasez de alimentos y abrigo, pérdidas de cosechas a causa de tempestades e inundaciones, la insolidaridad de los vecinos, precios bajos de venta a los mayoristas y elevados costes de las materias primas y bienes intermedios (productos fitosanitarios, extinción de plagas...), jornadas prolongadas de trabajo desde el alba hasta el anochecer, tareas que requieren esfuerzo físico, enfermedades específicas, como la pelagra, enfermedad de primavera o escorbuto, que afecta a Jotty, y otras calamidades. Compone un retrato veraz y entrañable, de trazos cálidos, cargados de sentido humanista y de interés por el ser humano.
El humor, abundante y festivo, se apoya en lances de la acción y, sobre todo, en personajes caricaturescos, como los de Beulah Bondi (la abuela) y Norman Lloyd, o ariscos y malhumorados, como los del vecino Devers (Naish) y su sobrino Finlay (Lloyd). Explica cómo se reflejan en las tareas agrícolas las estaciones del año, con una etapa invernal sin rendimientos, que se ha de dedicar a la pesca y a la caza, en espera de los primeros frutos de la primavera. Las penurias del invierno se ejemplifican con la pesca del barbo (pez comestible de río poco estimado) y la caza de la zarigüeya (pequeño marsupial propio del Continente americano).
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
Las interpretaciones de Zachary Scott, especializado en papeles de gángster, y Betty Field son convincentes. Scott entrega el que posiblemente es el mejor trabajo de su carrera. Beulah Bondi (abuela, viuda del abuelo Fayed Tucker) y Norman Lloyd (Finlay) interpretan papeles cómicos. Son elogiables las intervenciones de J. Carroll Naish (el vecino egoísta y frustrado) y Blanche Yurka (madre de Sam). Se sirve del paisaje para reforzar aspectos conceptuales y emocionales del film, que convierte en un testimonio simpático y sugerente de los antiguos granjeros, su amor a la libertad, constancia y espíritu de sacrificio. Compone una imagen emotiva y enternecedora del viejo mundo de la agricultura intensiva, de sus gentes conservadoras, aferradas a la tierra, las tradiciones y a la familia, sinceramente religiosas y preocupadas por la educación de los hijos. Construye la cinta como una sucesión de escenas sencillas, cálidas, deliciosas y llenas de gracia, no exentas de toques líricos. Los personajes se presentan bien caracterizados. Se prescinde de sensiblerías y sentimentalismos anacrónicos.
Los principales temas que se tratan son el elogio del coraje y la constancia; el amor a la tierra, la familia y los amigos; la oposición entre el campo y la ciudad; la lucha por la supervivencia; el valor del esfuerzo y el trabajo; la importancia y necesidad de los lazos interpersonales, etc. Rinde homenaje al cine a través de los carteles que cuelgan de las fachadas del pueblo: “Vogues of 1938” (Cummings 1937) e “Intermezzo: A Love Story” (Ratoff 1938), protagonizada por Ingrid Bergman. La referencia a los dos films sirve para aproximar la fecha de los hechos.
Son escenas destacadas la noche de tormenta, el panorama de la finca tras la lluvia torrencial, el interés de Sam por la escuela de los hijos, la botella de whisky ardiente a causa de un descuido, el intento de Sam y su primo Tim (Kemper) de rescatar a la vaca, la recolección de algodón en los campos del patrón Raston (Harvey), la comida en familia de la zarigüeya, el viaje de ida a la finca en un camión cargado hasta los topes, el cigarrillo que Sam lía para Nana, la pelea a puñetazos de Sam y Devers, etc.
La banda sonora, de Werner Janssen (“El capitán Kidd”, Lee, 1945), ofrece una partitura variada, con evocaciones de la caza (trompeta de caza), el amor de pareja, la desolación tras la tormenta, la fiesta de bodas, etc. Añade una canción coral tradicional de los recolectores de algodón, “La cucaracha” (pelea en la cervecería) y otras. La fotografía, de Lucien N. Andriot (“Eran cinco hermanos”, Bacon, 1944), crea imágenes contrastadas, de potente claroscuro, inspiración realista y de excelente concepción. Varias tomas estáticas son auténticas composiciones fotográficas (la familia ante el fuego del hogar).
Bibliografía
- Hildy JOHNSON, “Jean Renoir en tres películas”, blog.cine.com, julio 2009
- C. FAULKNER y P. DUNCAN (ed.), “Jean Renoir”, Taschen, pág. 126-128, Colonia 2007.
Los principales temas que se tratan son el elogio del coraje y la constancia; el amor a la tierra, la familia y los amigos; la oposición entre el campo y la ciudad; la lucha por la supervivencia; el valor del esfuerzo y el trabajo; la importancia y necesidad de los lazos interpersonales, etc. Rinde homenaje al cine a través de los carteles que cuelgan de las fachadas del pueblo: “Vogues of 1938” (Cummings 1937) e “Intermezzo: A Love Story” (Ratoff 1938), protagonizada por Ingrid Bergman. La referencia a los dos films sirve para aproximar la fecha de los hechos.
Son escenas destacadas la noche de tormenta, el panorama de la finca tras la lluvia torrencial, el interés de Sam por la escuela de los hijos, la botella de whisky ardiente a causa de un descuido, el intento de Sam y su primo Tim (Kemper) de rescatar a la vaca, la recolección de algodón en los campos del patrón Raston (Harvey), la comida en familia de la zarigüeya, el viaje de ida a la finca en un camión cargado hasta los topes, el cigarrillo que Sam lía para Nana, la pelea a puñetazos de Sam y Devers, etc.
La banda sonora, de Werner Janssen (“El capitán Kidd”, Lee, 1945), ofrece una partitura variada, con evocaciones de la caza (trompeta de caza), el amor de pareja, la desolación tras la tormenta, la fiesta de bodas, etc. Añade una canción coral tradicional de los recolectores de algodón, “La cucaracha” (pelea en la cervecería) y otras. La fotografía, de Lucien N. Andriot (“Eran cinco hermanos”, Bacon, 1944), crea imágenes contrastadas, de potente claroscuro, inspiración realista y de excelente concepción. Varias tomas estáticas son auténticas composiciones fotográficas (la familia ante el fuego del hogar).
Bibliografía
- Hildy JOHNSON, “Jean Renoir en tres películas”, blog.cine.com, julio 2009
- C. FAULKNER y P. DUNCAN (ed.), “Jean Renoir”, Taschen, pág. 126-128, Colonia 2007.