Película de Barbra Streisand en la que la diva no era la primera elección de su director, el francés Jean-Claude Tramont, pero a la que aterrizó tras ser despedida después de una semana de rodaje la actriz original. En aquel momento, la manager de Barbra era esposa del director galo que se estrenaba en USA con esta película, y ella fue la que animó a Barbra a hacerse con el personaje.

La actriz y directora se convertiría en la actriz ,mejor pagada de la época con un sueldo de 4 millones de euros, cualquier cosita. No se puede decir que sea de los mejores trabajos de la cantante pero está más que correcta, compartiendo protagonismo con un Gene Hackman que había vuelo de su descanso ya que el maravilloso actor se había tomado un tiempo de desconexión del cine por su agotamiento. Hackman se alejaba aquí de sus habituales trabajos serios y nos regala una encantadora actuación de la que saca petróleo aunque tuvo su guerra de egos con la Streisand en cuanto al salario.

Junto a ellos, un jovencísimo y guapísimo Dennis Quaid, una elegante Diane Ladd, madre de la actriz Laura Dern, y un atractivo Kevin Dobson
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Entretenida y agradable de ver para curiosear los primeros trabajos de la diva americana.
Un saludo,
Tess