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España España · Pasajero 58
Voto de floïd blue:
6
Acción. Thriller Tras un ataque sorpresa con drones, el agente Mike Banning (Gerard Butler) es acusado de un intento de asesinato del presidente de los Estados Unidos. Perseguido por su propia agencia y por el FBI, Banning inicia una carrera a contrarreloj en la que ha de desvelar al auténtico grupo terrorista que ha puesto su mirada sobre el presidente. Secuela de Objetivo: Londres (2016) (FILMAFFINITY)
30 de agosto de 2019
14 de 15 usuarios han encontrado esta crítica útil
Mike Banning es el jefe de los agente secretos de la guardia personal del señor presidente de los EEUU. Éste es su cometido y sus 3 películas no se salen del tiesto. La acción, que se puede criticar pero bien y con razón, se limita al entorno de este señor, a su seguridad, y a que esta seguridad se vea en entredicho. Es como si los responsables del film tuvieran un contrato en el que se especificara que todo vale, pero a cambio el presidente de los EEUU las tiene que pasar putas porque el público exige verle correr, sudar, ahogarse, sufrir, mancharse la cara, hablar con sus polis acojonado, traicionado, amenazado, mudo, acostado, ingresado, y próximo, incluso, a ser porculizado.

Mike Banning está para eso, para proteger al presidente pero al mismo tiempo para putearlo, para hacerle aguadillas, porque cuando Morgan Freeman (que con el tiempo será presidente de los EEUU de verdad), mira a Mike Banning con terror, no es porque estén siendo ametrallados por un avispero de drones enloquecidos, es sencillamente porque tiene a Mike Banning detrás de él, echándole el aliento y diciéndole en baja voz: "Adelante señor", y eso le aterra.

Así que se trata de cumplir el objetivo con “Objetivo Washington DC” sabiendo que el público quiere ver que si en este mundo nadie está a salvo, el mandamás de los EEUU tampoco. Y se necesita un punto de coherencia y de verosimilitud, que no sea todo porque sí, tanto lío gratuito, si no que, lo primero, surja un complot serio que justifique tanta acción. Y llegado a este punto en el que se muestra que en verdad todo es un lío increíble como la de Dios es Cristo, es cuando se necesita la inclusión de un elemento de apoyo.

¿Cuál es este punto de apoyo? Pues Morgan Freeman. Sabemos que este hombre ha sido ya presidente de los EEUU, y de otros también, da el pego de tío sensato, pero actualicemos el ambiente y llamémosle Trumbull, nombre con el que no hace faltan muchas luces para acercarnos a la actualidad.

Mike Banning no tiene la culpa del guion. Su misión no es escribir el guion, sino actuar. Yo le he visto más o menos como siempre, lo que pasa es que no le he visto tan cabreado como en las otras dos y eso, aunque no soy de los que se echan para atrás, sí es verdad que incide en la película.
-Mike, creo que debes seguir adelante, si quieres, pero que nadie te eche que para eso eres algo más que un amigo del presidente, eres su íntimo amigo, así que seas tú quien decidas. Un saludo.
floïd blue
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