Haz click aquí para copiar la URL
España España · estoesuncaracolyderrapa.blogspot.com/
Voto de Victor M Lazaro:
8
Drama Nuevas aventuras tanto personales como deportivas del boxeador Rocky Balboa, que en esta ocasión debe enfrentarse a un duro y frío boxeador soviético, llamado Ivan Drago. (FILMAFFINITY)
28 de enero de 2013
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
El otro día hablando con mis amigos sobre películas deportivas no pude evitar acordarme de la saga de Rocky Balboa, una de las sagas deportivas con más solera y de las que mayor éxito en taquilla se llevó. Casi han pasado tres décadas desde que se estrenara la cuarta entrega de las seis que la componen y todavía me sigo emocionando (ojo que va un spoiler) cuando en el último asalto del combate final Rocky tumba a Drago y le obliga a morder la lona. No me avergüenza reconocer que incluso se me escapa alguna lagrimilla cuando Rocky va asestando un golpe tras otro en el hígado del ruso. Para ser honesto con vosotros os debo confesar que de pequeño yo quería ser como Rocky, tener su fortaleza y su coraje, su entrega y su humildad, es decir, estar hecho de hierro y aguantarlo todo, tal y como le sugiere Drago a uno de sus entrenadores durante el combate final.

El propio Sylvester Stallone se puso tras las cámaras y sobre el papel para dirigir y escribir el guión de la cuarta entrega. ¿Es esta la mejor de la saga? Supongo que la mayoría diría que no, que la primera es una delicia y que a parte de ser un tributo al boxeo es una excelente obra cinematográfica galardonada con el Oscar a la mejor película de 1976. Sin embargo, para mi la cuarta entrega (galardonada con 5 Razzie) es la que me provoca más a nivel físico, con subidones de adrenalina, con unas sesiones de entrenamiento que van calentando al espectador y preparándolo para el clímax final. Además de una banda sonora estupenda tanto en su composición por Vince DiCola y como en la selección de canciones.

Tiene un guión muy simple pero efectivo donde la venganza, el patriotismo y la heroicidad se entremezclan con lo puramente deportivo. Incluso se habla del dopaje (que tan de moda está estos días). Quizás lo más reseñable de la película (quedaban escasos cuatros años para que cayera el telón de acero) es como Stallone, ya con un porvenir labrado y libre de ataduras, se permite el lujo de invocar a la paz entre las dos grandes potencias de aquel momento -la URSS y USA- en el discurso final: ¡ojo spoiler! "...aquí había dos hombres matándose el uno al otro...pero dos hombres es mejor que dos millones..." aplausos, ovaciones y uno preguntándose como es capaz de semejante reflexión después de haber recibido la somanta de palos que lleva encima (desde la primera película).

En resumen, aunque la película se rodará en Vancouver para los exteriores rusos, lo cierto es que consigue transmitir el ambiente adecuado. Es una película deportiva para flipar un rato y activar la vena del ejercicio físico. Su banda sonora es altamente recomendable para realizar cualquier tipo de actividad como el jogging, y vale la pena aunque tan sólo sea para gozar con el show que realiza James Brown en su interpretación de Living in America. Que el que desee la disfrute.

PS. Gracias Jane Oliver por descubrir a Sly. DEP.

Un saludo.
Victor M Lazaro
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow