Me gusta mucho Chris Marker porque es un director que habla de cosas muy complicadas, pero lo intenta decir siempre de manera muy sencilla, para que los que no somos muy listos (o listas, jeje) lo comprendamos. A veces no me entero de muchas cosas, porque la memoria de este director es enorme, pero creo que de eso se trata: de intentar capturar bellos momentos entre todo el torrente de ideas e imágenes que propone.

Esta última quizás no es de sus mejores películas, pero siempre es muy muy bueno. Como los fans de Marker saben, es un gran amante de los gatos (¡como yo!), así que se decidió a filmar por París los graffitis que un artista galo realizó. Así Marker, el viejo intelectual, se encuentra (una vez más) con las formas artísticas más contemporáneas, y de paso nos damos un bonito paseo por París, esa ciudad tan bonita a la que espero poder ir algún día.

En el cine de Marker vivimos de instantes excepcionales y esta película, más tranquila de lo habitual, te lo proporciona, pues al verla tengo la misma sensación que una tarde de domingo en la que no hay que ir a clase ni hacer nada especial. ¡Muy chula!

He aquí una película preciosa. Una historia de amor que no quiere ser excesivamente dramática, sino una historia de amor en un mundo donde la gente se une y se separa con mucha facilidad. Chris y Jessica viven un bello amor juvenil, un amor como nunca han vivido antes. Quizás dentro de unos años ya no estarán juntos, pero jamás olvidarán a la otra persona que les hizo sentir algo distinto en su interior por primera vez. Hay una gran inocencia en esta película. A mucha gente le dará risa, pero yo creo que está bien que estas historias se sigan realizando, que los cuentos de hadas se reproduzcan en la actualidad. Esta película lo hace mejor que Programa de Protección de Princesas, otra buena película de Disney, aunque inferior a esta. El príncipe es ahora una estrella de rock y la cenicienta es una chica que nada quiere saber de ese mundo, que aparece en la órbita del príncipe por casualidad y se terminan enamorando de manera inevitable.

¿Qué hay de malo en esta película? Pues realmente nada. Únicamente para aquellos que tengan prejuicios. Los que tengan prejuicios hacia el estilo de Disney Channel y hacia la música adolescente. Pero también el rock and roll de los Beatles y de los Rolling Stones escandalizó a una generación que estaba acostumbrada a Sinatra y a Bobby Vinton. Pero eso no hacía que fuese mala música, sino que la mayoría de la gente no aceptaba que la música no se dirigiera a ellos, sino a la generación siguiente. Y aquí las imágenes y la música se dirigen a esos chicos que tienen menos de 16 años y ven el mundo de una manera diferente. Sería muy prepotente por nuestra parte decir que esa forma de ver el mundo es peor que la nuestra. Yo no lo voy a decir, ni es mejor ni es peor, solo es diferente.

El gran logro de Starstruck reside en saber captar todas las tendencias de este Nuevo Mundo y proyectarlas en una película muy bonita, puede que tonta e ingenua, pero no más que muchos cuentos de hadas socialmente aceptados. Cuando George Lucas seleccionó muchos mitos clásicos para formar el mundo de La guerra de las galaxias, lo hizo (según propias declaraciones) porque había estudiado que a lo largo de la Historia, las civilizaciones iban incorporando mitos de otras para componer su propia idea del mundo. Y eso es lo que hace magistralmente esta película.

Seguiremos de cerca a su dúo protagonista, el guaperas Sterling Knight (que está mejor en Sunny entre estrellas) y la guapísima y adorable Danielle Cambell.

Siempre me acerco a las series de Disney con alegría, porque tienen todas esas cosas que nos gustan a los fans: niños que se meten en problemas, canciones y todo eso. Pero esta en lugar de centrarse en el estrellato de sus protagonistas (Jonas o Hannah Montana) apuesta por un estilo con más guión, más centrado en la historia de la familia. Así que no hay canciones, lo que es una decepción, pero no pasa nada porque todo lo que ocurre es muy gracioso.

Trata sobre una familia de magos. El padre no puede utilizar magia porque perdió el poder cuando era joven, así que enseña a sus hijos a usarla debidamente. Pero ellos son tan traviesos que la utilizan para beneficiarse en la escuela. A Alex no le hace falta, porque es guapa y popular, pero a veces quiere solucionar las cosas por la vía rápida o simplemente fastidiar a sus hermanos Justin (el rarito) y Max (el enano).

Es una serie graciosa para toda la familia. Centrada en la comedia y en las situaciones divertidas con la magia. Y el otro día pusieron la primera película en Disney Channel pero me la perdí, tengo que mirar cuando la repiten...

Vi esta película hace tiempo en Disney Channel. Y cuando la vuelven a echar, siempre digo que me quedaré sólo un rato a verla y al final me quedo toda la película. Es muy emocionante y divertida. Demi Lovato es muy guapa y han elegido muy bien su personaje ya que es más creíble como princesa que Selena Gómez, que se parece más a una chica de la calle (aunque para mí es más guapa).

Así que una película muy buena sobre los sueños de las adolescentes que recomiendo a todo el mundo, es para todos los públicos, no sólo para niñas. Lo único malo, por darle más seriedad a esta mi primera crítica, diré que no quedé del todo satisfecho porque ni Demi ni Selena se animan a cantar, pese a que lo hacen muy bien, como demuestran en los videos que pasan en Disney Channel en los anuncios. También aprovecho para recomendar las series que ambas protagonizan en este canal, Sunny entre estrellas de Demi (que se parece un poco al mecanismo formal de las películas de mi adorado Chris Marker) y Los magos de Waverly Place, un buen sitcom que no es sólo una recopilación de tópicos Disney (para eso ya tenemos la magnífica Hannah Montana).

Saludos a todos los de Filmaffinity y animaos a ver esta película tan buena!

La vi cuando era pequeña y me pareció una película muy divertida. Luego le cogí cariño y la veo bastante a menudo, aunque hace mucho que no la pasan por la tele y no la tengo en DVD. Así que me queda mi recuerdo de hace unos años para decir que es una película donde el buenazo de Shaquille, tan grande y feo él, hace de mago que cumple deseos. Parece como las películas de niños de los 80, todo así como muy desquiciado y con estética estridente, pero a los que nos gusta ese estilo, esta película lo cumple con creces.

Así que todo es así como muy infantil, de día de navidad en la que te aburres mucho y siempre aprecias esta peli. Encima tiene la novedad de Shaquille, que me parece muy buena, un hombre que ha hecho tanto por la comunidad afroamericana y por los niños más necesitados. Esperemos que haga más pelis, o que emitan ese programa que tiene en la tele americana.