Vaya dramón... Pero falta una super catástrofe natural en la historia para que sea redonda.
La serie está bien hecha pero para mi chirría por todos lados.
Una familia afroamericana se muda, tras un pasado doloroso, a una idílica urbanización de blancos en los Estados Unidos de los 60`s... Pues no los aceptan y les hacen la vida imposible. Si lo que querían es incomodarnos con el tema del racismo, pues lo consiguen...pero un tanto absurdo el planteamiento.
Pero los creadores, no contentos con eso, dijeron...y si les metemos a esta pobre familia unos fantasmas en la nueva casa que también les hagan la vida imposible? dicho y hecho... ahora tenemos a esta pobre familia aterrorizada por los blancos en la urba y por los fantasmas en la casa...
Yo, además, hubiese metido un gran terremoto o una erupción volcánica y a tomar por c... a seguir martirizando a la pobre familia por si no hemos tenido bastante drama.

La he seguido con gran interés. La originalidad de esta serie es mostrarnos las luchas de poder de las altas finanzas, pero en este caso, con la city londinense y la crisis del 2008 de la Unión Europea, como telón de fondo. Tiene una factura buena, una historia potente y unos personajes/actuaciones que no están nada mal...
Aunque tenga algunos errores, que más se puede pedir...

Pues curiosa serie...la verdad es que la serie tiene muchos errores empezando por el guión que es flojillo tirando a malo. Siguiendo con que algunos personajes son y están muy forzados o que la trama principal y las subtramas son un poco tontas y poco creíbles.
Pero dicho lo malo, yo he disfrutado viéndola...Es una comedia coral, a ratos bastante divertida, con personajes histriónicos y exagerados que a veces funcionan, y donde sobresalen dos joyitas que no conocía como Mona Martínez y, sobre todo, Javier Coll... Aunque el reparto en general me parece gracioso y es lo que hace que esta serie no sea un bodrio...cuando salen estos dos, la comedia se eleva.