.E.T. El extraterrestre de Steven Spielberg, es un drama de ciencia ficción, y un auténtico film de culto que resiste el paso del tiempo. Dirigida de forma certera, tratando un tema tan arriesgado e innovador en su momento, tiene un resultado asombroso, perfecto y emocionante, que consagró al director como uno de los mejores de su época.
El guión de Melissa Mathison, basado en un amigo imaginario de Spielberg cuando era niño, es entrañable y totalmente resistente al paso del tiempo, lo que se dice una obra imperecedera, argumentado de modo que engancha tanto a los más pequeños como a mayores.
La música, es grandiosa y majestuosa, como no iba a ser menos tratándose de John Williams, emotiva y melódica, conmueve al publico generación tras generación. Además los sonidos, son extraordinarios y espectaculares, dignos ganadores del oscar. Acompañados por una fotografía magistral y espléndida, maravillosa en muchos sentidos e idónea a la acción.
Las actuaciones, carismáticas y remarcables de unos niños marcando claramente la inocencia de la película. Con una narrativa cercana y familiar, ya que es expuesta por jóvenes actores que son los que marcan el ritmo del film de forma tierna y sentimental.
Los efectos, también son dignos de elogio, ya que son competentes para la época, asombrosos y llamativos. Al igual que también cabe destacar los efectos de cámara y planos trabajados con travelling de seguimiento para dar realismo a la persecución final.
En definitiva, una obra inmortal e insustituible, por ser entretenida y enternecedora, considerada por muchos como la mejor película de la historia de ciencia ficción, y razones no les faltan porque pasarán 50 años, y seguirá teniendo la misma magia que el primer día. Totalmente recomendable y de visión obligada para todo tipo de públicos.