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San Marino San Marino · Ladera del Monte Titano
Voto de Fej Delvahe:
6
Drama 1945, vísperas de la rendición japonesa. En medio de una tensa atmósfera de guerra, el Doctor Akagi, médico de un pueblo pesquero en una de las islas japonesas, está consternado por la cantidad de personas que caen afectadas de hepatitis, primera causa de muerte en el desnutrido país. Ante esta grave situación decide implicarse para salvar su integridad profesional. Se alía con sus viejos colegas; un monje que ha colgado los hábitos, un ... [+]
2 de abril de 2008
17 de 23 usuarios han encontrado esta crítica útil
Sin duda se trata de una película interesante, pero Shohei Imamura no moldea bien el barro de la gran obra que emprende. A ratos resulta una película muy buena, por ejemplo cuando el médico Akagi se pone a investigar con un simple microscopio al virus de la hepatitis o en sus visitas profesionales a los enfermos; pero no se comprende que el director de este filme entremezcle estas partes rigurosas, serias y de máximo interés con otras bastante chabacanas y extemporáneas como la de la ballena o nube atómica en forma de hígado. Además tampoco sabe desarrollar bien la adoración y amor que siente la sirvienta hacia el galeno, todo un potencial argumentativo que de haberle sabido dar cuerpo, habría hecho una película mucho más estimulante y de las que dan que hablar.

Así pues, es obvio que este filme con estas formas no podía ser tomado muy en serio dado que su propio director no lo realiza precisamente con ese aire ni lo dota con tal impresión, tampoco con el suficiente arte como para ser considerado NOTABLE.

No obstante el mensaje del film es importante y valorativo de la figura ideal de los médicos de familia o de cabecera, habidos allá por los años cuarenta, en pleno desarrollo de la II G.M., hombres sencillos, solidarios, siempre dispuestos a ir a la casa de los enfermos que le solicitaban atención, un tipo de profesional médico que ya ha desaparecido (ahora todos, aunque sea con la lengua afuera y las tripas saliéndose por una herida, tenemos que ir a verlos a ellos a sus clínicas, hospitales o consultas particulares y encima pagarles de lo lindo). El médico Akagi es de los que ya no se ven, corre y corre continuamente por llegar a tiempo a todas las llamadas de sus enfermos, la mayoría de los cuales ni siquiera pueden pagarle.

Fej Delvahe
Fej Delvahe
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