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España España · Valladolid
Voto de vircenguetorix:
9
Western. Bélico George Custer (Errol Flynn) llega a la Academia de West Point lleno de arrogancia y vanidad. Aunque su carácter indisciplinado le ocasionará numerosos problemas con sus superiores, debido a la acuciante necesidad de oficiales para la Guerra de Secesión (1861-1865), es enviado al frente. Terminada la guerra, se casa con Beth (Olivia de Havilland), pero pronto le asignan un nuevo destino: la guerra contra los indios. Al frente del Séptimo ... [+]
23 de noviembre de 2009
62 de 66 usuarios han encontrado esta crítica útil
En algunas ocasiones -no tan frecuentemente como algunos creen-, el arte puede rectificar la historia y crear una imagen que tiene más fuerza que la verídica. Eso pasa con el cantar de gesta, y más concretamente con el “Poema de Mío Cid”. Otro de esos escasos milagros ocurre con “Murieron con las botas puestas”, George Armstrong Custer ya no será nunca él, es Errol Flyn, un actor que nació para interpretar este papel.

Rodada en la época dorada de la Warner (por favor no es de la Metro, cámbienlo) por el mismo productor de “Casablanca”, “Murieron con las botas puestas” representa como pocas el apogeo del cine de estudio donde un grupo de profesionales cumplía su trabajo de forma eficiente. Ahora todos quieren ser artistas y hacer cine de autor.

Entre ellos tenemos al director, un Raoul Walsh, en una de sus grandes películas de siempre, que hace una obra tan buena que hasta el mismísimo John Ford tuvo que copiarle en muchos sentidos en “Fort Apache”. Por cierto que el fotógrafo de esta película, era el habitual colaborador también de Ford. El caso es que Walsh homenajea a su maestro David W. Griffith, brindándonos un espectáculo con mayúsculas.

Muchas veces hablamos de química entre los protagonistas, tonterías, esa palabra hay reservarla para lo que vemos aquí entre Errol Flynn y Olivia de Havilland, su última escena de despedida forma parte de los momentos más románticos de la historia del cine. Inolvidable. Pero también el Garryowen y varias escenas más.

Pero es que además es una película que transmite una emoción y una viveza increíbles, con un ritmo que no decae en ningún momento (en dos horas y veinte minutos), es lo que llaman los americanos una película física, y con una fe en el hombre verdaderamente extraordinaria, y sobre todo una gran historia de amor.

Clasicazo.

Nota: 8,7.
vircenguetorix
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