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Voto de Javicaysa:
6
Thriller. Acción. Drama Año 1987. La ciudad de Sevilla se prepara para acoger la Expo del 92. Ángel (Mario Casas), un joven inteligente y ambicioso, aspira a ser inspector de policía, y entró en el cuerpo intentando respetar la ley. Rafael (Antonio de la Torre), en cambio, es un policía expeditivo, contundente y arrogante. Junto con Miguel (José Manuel Poga) y Mateo (Joaquín Núñez) forman el Grupo 7, un conjunto de policías sin escrúpulos, dispuestos a todo ... [+]
24 de marzo de 2012
102 de 142 usuarios han encontrado esta crítica útil
Un grupo de cuatro policías (conocido como "Grupo 7") tiene como misión limpiar las calles de Sevilla de drogas y de gentes de mal vivir, en las vísperas de la Expo 92. Cada cual posee sus cosillas: uno es honesto y buen tío; otro, un tipo violento y amargado; el tercero, un salado sevillano que se las sabe todas; el último, un homófobo que se conoce bien el oficio. Entre los cuatro, merced a unos chanchullos no del todo legales, empiezan a ganarse fama política y policial, cuando empiezan a llegar los problemas...

Lo que podría ser una cosa chusca mal traída, se convierte en un intenso, entretenidísimo y bien resuelto thriller español que da el nivel necesario. Vaya si lo da. Toda la parte policial está rodada con primor (salvo un par de detalles que desvelo en el spoiler); se cuidan las subtramas; la ambientación. Las líneas de diálogo tienen mucha chispa; nunca ve uno el artificio. Incluso en las redadas más jodidas de la peli mantienen todos su salero sevillano, lo cual le da al asunto verdadera vidilla. Las escenas impactan, el argumento nunca se lía o aburre, todo es lógico y está bien traído. En definitiva: una peli de género que sobresale en el panorama español.

Pero no es oro todo lo que reluce. De los cuatros protagonistas, sólo 2 poseen realmente una fuerte interioridad. El homófobo (y fíjense que no de otro modo sé describirlo) es un personaje plano, que está ahí y ya. El casado se enamora de una puta, y ahí se acaba su arco. Casas y De la Torre sí poseen una vida interior, pero nos importa un bledo: lo hemos visto ya mil veces. Uno de ellos padece dificultades en su matrimonio, porque es policía, claro. Imma Cuesta lo hace bien, pero su personaje no va más allá de cuatro escenas y dos actitudes. El otro afronta un drama personal y amoroso que parece metido con calzador. Ni nos emocionan ni nos alteran sus desdichadas cuitas. De ninguno de los dos.

El conjunto resulta, por tanto, frustrante. Su calidad técnica y su seriedad (se toma en serio a sí misma, y le sale bien) triunfan, pero las tramas emocionales no calan en el espectador. Son banales, son estereotipos.

En fin, es de agradecer una sorpresa tan madura como ésta en el cine español, pero no se ha llegado al nivel de cintas recientes como Celda 211. Una pena. Aunque se agradece el muy buen intento. Es cine patrio más que digno.

Lo mejor: evita lo fácil, rebosa talento, y posee un tono solemne que funciona. Lo peor: la parte emocional está ya más que vista, y no emociona.

(Sigue en spoiler hablando sobre los actores y algunos hechos del guión).
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Javicaysa
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