Harmonium (2016)

La historia se mete en las vidas de Toshio (Kanji Furutachi) y Akié (Mariko Tsutsui), una pareja de esposos que tienen una vida tranquila junto a su pequeña hija Hotaru (Momone Shinokawa) que ansía poder tocar con excelencia el harmonium.
Inesperadamente Toshio recibe la visita de un viejo amigo de la juventud, Yasaka (Tadanobu Asano), quien se instala a trabajar en el taller y se ubica en un pequeño cobertizo dentro de la casa familiar.
Yasaka acaba de cumplir una condena por asesinato y no tiene nada que ocultar, inclusive le relata a Akié su dura experiencia carcelaria y las cartas que le escribió a la familia de la víctima esperando ser perdonado.
De a poco el visitante se convierte en un miembro mas de la cotidianeidad de la familia, ayuda a la pequeña a mejorar con el piano y mantiene una respetuosa pero intensa vinculación con la esposa de su amigo. La reaparición de un secreto del pasado hará estallar todo ese afable vínculo.

Seguida del anticipado plato fuerte, Harmonium, del director nipón Kôji Fukada, galardonada con el premio del Jurado de la sección Un certain regard del Festival de Cannes. Toshio y su mujer Mifune llevan una vida sin alborotos en las afueras de una ciudad japonesa, dónde crían a su pequeña hija, que toca el Harmonio. Toshio se ve sorprendido una mañana en el taller por la súbita aparición de su viejo amigo Yasaka (Tadanobu Asano, misterioso y excelso), que ha salido de la cárcel tras diez años cumpliendo condena. Un viaje que se cuece a fuego lento y que muta paulatinamente de una entrañable película familiar a una desasosegante intriga psicológica de pasados dolorosos, crímenes ocultos y vínculos a punto de estallar. Una película pausada y pequeña que atrapa al espectador y le sitúa en un estado de malestar e incomodidad suspicaz desde la contención. Un ejercicio muy fino en el plano atmosférico y tonal, que gracias a una estupenda dirección construye un relato que envuelve al espectador al borde de estremecerse. Las interpretaciones son notables, como eficaz es también la escasa banda sonora y el montaje de la película, que con apenas unos pocos planos de seguimiento permite que el espectador controle sin problema las dimensiones y características de unos escenarios y universos plenamente creíbles.

Bien por su modesta producción, bien por el cariz costumbrista que también rodea el filme, el acabado fotográfico y el lenguaje de su realización es competente pero poco destacable. Si bien atractiva e impredecible, la trama nunca llega a clarificarse del todo aún sin ser particularmente imbricada. Ciertas incógnitas nunca quedan resueltas, y la construcción gradual en pos de un aumento de la tensión cierra en un final interesante e inesperado, pero también anticlimático y extraño desde el punto de vista de la concordancia tonal con el thriller previamente establecido. Pero sin duda la mayor distracción de la película es la decisión de un personaje en un importante momento dramático del filme que marca un importante salto temporal en el desarrollo de la trama. Un guión muy interesante pero no plenamente redondo que queda a las puertas de redondear esta película como extraordinaria o magistral, resultando de todos modos una obra notable y muy recomendable.

Intrigante, malsana y pausada, Harmonium es un thriller familiar ajeno a cualquier convención o lugar común que aún con sus sombras se desmarca de largo de sus predecesoras del Unknown.