Testigo (2000)

Yo también he tenido una premonición: sabía que no iba a ver la mejor película de Sam Raimi.
Ya con “Entre el amor y el juego” Raimi había iniciado su viaje directo al mainstream y ponerse al servicio del cine más comercial. “Premonición” no es más que un punto de inflexión (no tuvo el éxito en taquilla que se esperaba) previo a sus mayores taquillazos de la mano de Spider-man.

Con un envidiable reparto, el que dirigiese la trilogía de “Evil dead” (cómo han cambiado los tiempos) se dedica a introducir sustos efectistas bajo una historia simple, monótona y previsible con sabor a telefilme.
Raimi intenta por todos los medios convertir a Jessica King en la nueva Laura Palmer y sólo consigue a una fulana pija y paleta. Le falta encanto y clase, atmósfera, emoción e intensidad que sólo consigue mediante trucos de feria visuales y trampas varias.
Lo que nunca necesito en su mejor película: “Un plan sencillo”.
Aún con todo lo anterior se deja ver con facilidad.

Lo mejor es la frase de la película: "No soportare otra noche como esta. Necesito que me eches las cartas". Sin comentarios.
Atención a un posible remake español de la mano de la bruja Lola o Aramis Fuster.

Con un reparto repleto de caras conocidas se presenta esta película de suspense sobrenatural. Una vidente (Cate Blanchett) de un pequeño pueblo colabora con la policía en la localización del cadáver y esclarecimiento del asesinato de una joven (Katie Holmes). Las visiones premonitorias y los giros en el argumento te mantendrán entretenido/ a durante la duración de la película en la que destaca la mirada de Cate Blanchett y el buen trabajo general hecho en este film.