Moving McAllister (2007)

La verdad es que Jon Heder fue una de las sorpresas que tuve el año pasado, no en vano con una sola secuencia (el bailecito de Napoleon Dynamite) me fascinó, me dejó patidifuso y sin saber muy bien que pensar. Luego vinieron "Patinazo a la gloria" (el "¡You sex demon! ¡sex thing!" quedará grabado en mi memoria durante muchísimo tiempo como uno de los momentos más antológicos y brillantes de aquel film) y "School for scoundrels", que lo confirmaban como un pequeño genio a tener en cuenta, no en vano había demostrado al lado del gran Ferrell que valía, y mucho. Y en cambio, lo que sí debería tomar es el ejemplo de ese otro genial humorista que, aunque siempre vague por los mismos derroteros (a saber, la comedia con una pizca satírica, mucha parodia y mucho homenaje, en especial de trasfondo deportivo), el tío sabe como bordar una y otra y otra vez papeles que, dentro de un mismo marco, maneja para que resulten dispares.

Pero Heder, va y se nos mete aquí, una de esas road movies tontorronas sin mucho que contar. Porque la historia es tan obvia, tan blanda, tan tontorrona, que uno termina preguntándose a donde quiere dirigirse la cinta verdaderamente, si hay algo más que una comedieta romántica de palo con un par de momentos chispeantes, o si en realidad podría tener más aspiraciones.

El metraje avanza y, sin embargo, terminas dándote cuenta que aquí no hay qué escarbar ni donde escarbar, que desde los títulos de crédito todo estaba dicho y poco más quedaba que alegar: Que si un chico bobo por aquí, que si una muchacha de toma-pan-y-moja por allí, que si el tipo freak o tarado al fondo, a la derecha, que si la desidia, el aburrimiento y el hastío por ver como te enchufan por decimonovena vez la misma historia de marras, primera puerta a mano derecha, y que si un pequeño resquicio de esperanza en la quinta planta, en el ático. Que si hombre... ¿no lo ves? Allí, allí arriba, en caida libre, y a rascarla. Mejor que ver esto hubiese sido, sin lugar a dudas.

Ahora mismo esta película no se ha estrenado en ningún lugar (salvo Estados Unidos) ni siquiera en DVD. No es una cinta de Oscar pero os aseguro que es mucho mejor que cualquiera de las comedias románticas que están ahora mismo en los cines.

"Moving McAllister" es disfrutable, divertida y entretenida. Yo no pedía nada más. Es cierto que la historia es tópica pero a mí se me hizo entrañable. Tenemos a Rick (Ben Gourley), un chaval desesperado por ascender en el trabajo y que por ello aceptará ayudar en la mudanza de la sobrina del presidente, una chica de nombre Michelle (Mila Kunis). Irán en un camión destartalado desde Miami hasta Los Angeles. Un viaje que será de todo menos tranquilo.

Para mí, esta película destila diversión gracias a los alocados secundarios que vamos conociendo a lo largo del camino y hacen que todo el peso de la cinta no recaiga todo el rato en los hombros de los dos protagonistas, más bien en uno de ellos. Lo que hay que tener claro es que la gracia de todo esto siempre ha sido juntar a dos personajes muy distintas, uno será alocado y espontáneo y el otro un escéptico que irá cambiando (a mejor) a lo largo del film hasta soltarse y disfrutar como su compañero de viaje. Pues bien, aquí el personaje alocado es Michelle (Mila Kunis) y el escéptico y maniático es Rick (Ben Gourley) lo que hace que la chica se coma a su compañero de reparto durante todo el metraje porque su personaje es más interesante, es más espontáneo, te cae mejor y encima Kunis actúa muchísimo mejor que Gourley. Suele pasar.

Mila Kunis está fabulosa en esta película y demuestra tener algo muy especial, algo que ya demostró en "Paso de Tí" o incluso "En el Libro de Eli". Esa cosa especial se llama naturalidad. Da gusto verla actuar porque llega un momento en el que parece que no lo está haciendo y el mayor problema de la cinta es que su compañero de reparto no está a su altura, puede que debido a su menor experiencia, no lo se. Por suerte gracias a Kunis y a los secundarios donde hay que destacar a John Heder tenemos un viaje antológico donde les sucede casi de todo y donde la cerdita Dorothy se ha convertido para mí en un personaje/animal ya antológico.

Vuelvo a repetir que no es una cinta de Oscar pero yo, que me sente a verla sin saber nada de ella, me lo pasé estupendamente.

Lo peor: A Ben Gourley se lo comen con patatas pero al menos se esfuerza.

Lo mejor: Mila Kunis nos sigue demostrando que es algo más que un cuerpo y una cara bonita. El camión y Dorothy que se convierten casi en dos protagonistas más.

Yo la recomiendo para pasar un buen rato. "Moving McAllister" es mucho mejor que bazofias como "Confesiones de una Compradora Compulsiva" o "Como Locos a por el Oro" y estas dos últimas han tenido unos estrenos multitudinarios. La vida está llena de injusticias.