El marginado (1954)

Entretenido western de serie B, escorado un poquitín a la C.
Peca, supongo, de falta de ambición, no deseando más que hacer pasar el ratillo y a fe que lo consigue de sobra.
Y lo hace porque la dirección de William Whitney, siempre eficaz artesano, saca provecho de los no muchos mimbres de los que posee.
Las escenas de acción están bien rodadas, con brío y agilidad, y se ven atractivas escenas como una buena y espectacular pelea a puñetazos entre el protagonista y su jefe de pistoleros...¡a caballo, a galope tendido!.
También destacan las dos actrices protagonistas, ambas bonitas y excelentes en sus papeles.
En definitiva, que deja un buen sabor de boca, aunque es bien cierto que se olvide al de poco tiempo.

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¿Qué decir de William Witney? ¿Serie B, C, D...? 142 ttítulos en IMBD. Especialista en westerns. Hombre expeditivo, de no perder el tiempo, de ir al grano, de lidiar con magros presupuestos y dar lo mejor de sí. De vez en cuando, alguna sorpresa. El marginado es una de ellas. A pesar del Trucolor (sic), a pesar de la copia italiana que nos endosó la 2, a pesar del ajustado presupuesto, Witney despacha un western enérgico y energético, donde el peso de la narración gira alrededor de un sobrino cuyo principal objetivo es apoderarse del rancho de su tío y, si es preciso, eliminarle (al fin y al cabo, le robó su patrimonio). Este argumento da pie a numerosos tiroteos, cabalgadas, escenas de violencia y traiciones sin cuento. El chico rebelde es John Derek, guapo y ágil, bastante acertado en su cometido, cuando era una joven promesa y no se dedicaba a ligar con pibones como Ursula y Bo, eso vino después. Se encuentra nuestro chico dividido entre dos mujeres, la rubia que va a casarse con su tío (Catherine McLeod, muy fina ella) y una fogosa morena por la que apostamos todos (Joan Evans, de exuberantes carnes). El malo de la función es un pétreo Jim Davis, muy en su papel, y distinguimos entre los secundarios gente tan curtida como Slim Pickens y Frank Ferguson. Para ser un título de usar y tirar, es bastante superior a lo que esperábamos. Western sólido, entretenido y articulado con sobriedad. Una sorpresa.