Excelente film de Hitchcock que encuentra en la velocidad y la inverosimilitud sus mejores armas. La actuación de Cary Grant es inolvidable, y Eva Marie Saint cumple a buen nivel. Algunos la tachan de absurda y ridícula, pero en realidad intenta serlo. El guión está lleno de giros argumentales que hacen que sea entretenida de principio a fin. La banda sonora, además, es exquisita.
Spoiler:
A destacar la grandiosa y ultrafamosa escena del avión de fumigado (que será siempre uno de los grandes iconos para el recuerdo de Hitchcock), así como las diversas situaciones absurdas (como la subasta o la persecución en el monte Rushmore).