Tras la ejecución, por orden de Calígula, de Marcelo (Richard Burton) y Diana (Jean Simons), el apóstol Pedro (Michael Rennie) confia la túnica de Cristo a Demetrius (Victor Mature). Este es reclutado como gladiador, y cuando piensa que la joven a la que ama ha fallecido, por la tremenda impresión que le produce el hecho de que varios gladiadores intenten violarla, reniega de su fe y se convierte en Tribuno, a la vez que en protegido y amante de la famosa Mesalina (Susan Hayward). En su nueva condición, Demetrius busca la túnica entre sus antiguos compañeros para ofrecersela a Calígula, quien finalmente resulta asesinado por su guardia pretoriana. Claudio, el esposo de Mesalina, es nombrado nuevo emperador de Roma, cambiando sustancialmente la política del Imperio con respecto a los cristianos.