“The ring” Remake de la película del mismo titulo dirigida por Hideo Nakata e inspirada en una leyenda urbana resultó todo un bombazo en su día. Al igual que ocurriera con “El sexto sentido”, “Los Otros” fue muy bien recibida por la crítica y resultó todo un taquillazo gracias a una promoción efectiva (La productora distribuyó en diferentes conciertos copias de la “cinta asesina” y además creó varias paginas webs para darle mayor credibilidad a la leyenda que curiosamente desaparecieron cuando se estrenó la película)

Gore Verbinski (director que no sabrá donde guardar el dinero recaudado con la exitosa saga “Piratas del Caribe”) deja a un lado el susto fácil y sin sentido (tan utilizadísimo en el terror adolescente) para someternos a una atmósfera realmente angustiosa, donde mi querida “SAMARA” (autora de un par de días sin pegar ojo) juega un papel inquietante y es que en los tiempos que corrían en el género de terror no estaba tan explotado los “piel leche de pelo oscuro” y acojonaban que no veas.

Pero quizás lo más arriesgado por parte del Sr. Verbinski fue el final ausente por completo de la oscuridad (como ya hiciese nuestro querido Stanley Kubrick en el Resplandor durante la mayor parte de la película, metiendo el miedo en el cuerpo con lugares tétricos y angustiosos, sin oscuridad) pues podían haberle criticado de que el final no estaba a la altura, de que el final esto de que el final lo otro pero lo cierto es que nadie lo hizo y yo personalmente me parece estupendo por parte de Verbinski, aunque es cierto que el final de la original es más aterrador con la oscuridad (A mí al menos me acojonó más).

Por favor véanla de noche y con volumen a tope pienso que de ello dependera que os guste más o menos.

Por cierto para 2009 tendremos en nuestros cines la tercera parte de “The ring”.

COMO DETALLE DE CURIOSIDAD: Se emplean técnicas subliminales a lo largo de toda la película. Por ejemplo, en la transición entre la escena del ferry de los caballos y la secuencia en la que Rachel conduce hacia la granja de Anna Morgan. Allí se puede vislumbrar una imagen de ‘Ring’ durante una fracción de segundo.