Haz click aquí para copiar la URL
España España · Valencia
Voto de Arakiri:
6
Drama Drama centrado en dos personajes, un cobrador de préstamos solitario y sin escrúpulos (Lee Jung-Jin) y una mujer (Jo Min-Su) que se presenta un día pidiéndole disculpas por haberle abandonado, asegurando que es su madre biológica. (FILMAFFINITY)
11 de diciembre de 2012
4 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Muchos éramos los que demandábamos un cambio de registro de Kim Ki-duk, que si bien este en “Piedad” no llega a producirse del todo, si se desmarca sustancialmente respecto a lo reiterativo de sus últimos trabajos. Con una estética mas áspera, cercana a la del falso documental de “Arirang”, Kim nos vuelve a ofrecer una historia de violencia e impávidos psicológicos y mentales. Acostumbrados a un cine, el surcoreano, donde en multitud de ocasiones los antagonistas son recreados como malvados personajes sin corazón que en ocasiones rayan lo caricaturesco, Kim vuelve a desmarcarse de la industria autóctona, y utiliza a estos marginados, violentos y disfuncionales seres como protagonistas, como ya hizo en tantas otras ocasiones, como ya lo hizo Lee Chang-dong en sus primeros trabajos o como lo han hecho recientemente “Nameless Ganster” o “Breathless”.

Aunque sea involuntariamente, pues a Kim indistintamente de si es con las arcas llenas o no, solo le interesa contar su historia, y seguramente para sí, “Piedad” nos muestra las consecuencias del feroz mundo capitalista neo-liberal al que están o estamos sometidos todos los estados satélites de los States. Un cruel sistema que va cogido de la mano junto con los personajes de la película, un Kim más crudo y como con “Dirección desconocida” menos metafórico, aunque en esta ocasión llegando a rayar lo enfermizo. Los fans del director, sedientos de violencia gratuita lo aplaudirán, yo lo aplaudo por que esta vez lo hace sin efectismos baratos.

Una historia que entrelaza el (des)amor y la venganza de una manera intrincada, casi lirica, más cercana al terror que a cualquier atisbo de thriller o drama. El papel psicológico que juega su función en su lógico y esperado final (por debajo de su compatriota “I Saw the Devil” y ya ni que decir de “Seven”) nos muestra que cinematográficamente Kim Ki-duk aún no ha muerto, al menos de momento…
Arakiri
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow