No me puedo creer la crítica que acabo de leer. No se quien la ha escrito, pero me hace sospechar que pudiera tratarse de alguien relacionado con la propia película. O posiblemente me equivoque porque, quien sabe, para gustos, los colores. Lo que sí se es que a la salida del cine, en el festival Syfy, y mientras hacíamos cola para la siguiente película, las opiniones que escuchamos y compartimos los que allí estábamos fueron devastadoras, hasta el punto de provocar las risas entre los que combatíamos el frío de la espera, nos conociéramos o no. La película a mi juicio, y no sólo al mío, no hay por donde cogerla: no tiene ritmo, está mal doblada, abusa de la cámara lenta, errores de raccord, monólogos pretenciosos y larguísimos, buitres leonados y caballos con doma y montura española, cuando se supone que estamos en el oeste americano, música y canciones que no vienen a cuento, un sólo escenario, y nada nuevo bajo el sol. Por decir algo bueno, el primer minuto me gustó, y también el tiroteo final, que está bastante bien filmado (me recuerda al de Open Range). Los actores lo hacen dignamente, aquí no hay objeciones, pero es que el guión, la dirección, el doblaje y el montaje... puf, puf.
Matellano me hace recordar a Ed Wood a la española, y lo difícil que es hacer una buena película. Le reconozco su valor y su entrega, que admiro, pero la película es mala, muy mala, malísima.