Haz click aquí para copiar la URL
Sudán Sudán · Lasinfàn Tasmela
Voto de Ok Rick:
8
Aventuras. Acción. Drama. Bélico Un grupo de legionarios franceses llega a un fuerte en medio del desierto y descubre que todos los hombres están muertos; apoyados en los muros y en posición de vigilancia, pero muertos. Este extraño suceso es el punto de partida de una enigmática historia relacionada con la desaparición de un valioso zafiro y con la historia de tres hermanos alistados en la legión por un asunto de honor. (FILMAFFINITY)
9 de enero de 2009
22 de 23 usuarios han encontrado esta crítica útil
William A. Wellman fue uno de esos "artesanos" que magnificaron el Hollywood clásico. Por artesano entendemos, más o menos, aquel director cuyo nombre pocas veces se cita en las listas de turno (ni se reivindica) pero que por calidad y cantidad de producción se hizo con un importante hueco en la mencionada meca del cine. De Cukor, Wyler, Ford, etc. se menciona su nombre; de Curtiz, Wellman o Siodmak sus películas, pocas veces asocidas a su autor. El caso más excepcional sería el de Casablanca, obra del primero: Bogart, Bergman, la Marsellesa, el final, los diálogos, Paul Henreid, problemas de rodaje, Peter Lorre, every body comes to Rick, no se sabe el final.... y no se nombra a Michael Curtiz.

Wellman, excepcional director (evitemos eso de artesano), se caracterizó como muchos "de sus compañeros de grupo" por realizar incursiones afortunadas en diferentes géneros: bélico (Alas), gángsters (El enemigo público), comedia (La reina de Nueva York), drama (Ha nacido una estrella) o western (Caravana de mujeres, Incidente en Ox-Bow).

En esta ocasión tocaba el género de aventuras, en su versión aventuras coloniales. Este subgénero, por su parte, está salpicado de películas excepcionales: Tres lanceros bengalíes, Gunga Din, El hombre que pudo reinar, etc. El escenario aquí, la Legión Extranjera francesa, al igual que en Marruecos (de Stenberg); y Gary Cooper repitiendo uniforme que, la verdad, le sienta de miedo.

(Ay, esa escena final de Marruecos con los zapatos de la Dietrich).

Beau Geste es una gran película de aventuras. Narrada casi toda ella a través de dos flash backs (uno de ellos ocupa gran parte del metraje), se nos cuenta la razón por la que tres hermanos huérfanos acaban enrolándose en el cuerpo militar citado y su lucha contra los tuaregs en el desierto africano.

Mezclando sabiamente sentido del humor y acción, junto al requerido tono épico de estas cintas, Wellman (siguiendo la novela de P.C.Wren, adaptada por Robert Carson) nos ofrece una cinta sin concesiones, con un ritmo endiablado. Y se le agradece que no introduzca discursos políticos innecesarios que estorben la trama (sólo se deslizan dos o tres frases) y justifiquen el colonialismo (léase ocupación de otro territorio con fines económicos y políticos).

Destacar, cómo no, al gran Cooper (el mismo personaje en su juventud está interpretado por Donald O'Connor y, no, no hay número musical) y a su lado a Ray Milland. Y además, el sargento Markov (excepcional Brian Donlevy), duro, codicioso, despreciable, un hijo de puta pero gran soldado, características que hemos vuelto a ver en miles de ocasiones en el cine (quizá sea referente de los instructores de Oficial y Caballero o La chaqueta metálica). O, también, una guapísima Susan Hayward en uno de sus primeros papeles.

Excepcional película, pues, que garantiza diversión y ansias de reivindicar a todos esos grandes directores olvidados o infravalorados.
Ok Rick
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow