UFO es un caramelo con envoltorio y sabor particular. Si en una peli sobre ovnis a los cinco minutos Gillian Anderson se apropia de la pantalla...pues eso no es tanto el guión como sí un cameo de Dana Scully (camuflada bajo otro rol y nuevo personaje).

A su vez, el guión de UFO puede espantar a más de uno: confundirá a cualquier espectador pasajero que tenga en mente abordar ciencia ficción genérica. Estamos ante una peli de carácter poco o nada visual, puntillosamente matemática, obsesivamente teórica. Busca, por todos los medios, de hacer entender una hipótesis (Estructura de Secuencia Fina). Lo hace mediante ejemplificaciones variadas, focalizadas en diálogos e intercambio de opiniones/saberes a lo largo del desarrollo. Descubriendo el sentido de esa hipótesis se podrá entender que es lo que está sucediendo.

Al tener un enfoque tan específico, UFO orienta sus intenciones sobre un público minoritario, ya versado en teorías e hipótesis sobre el contacto extraterrestre. Construye un guiño inteligente dirigido a esas ideas sobre conspiraciones que buscan saber la verdad sin tener que caer en tierras huecas o planas; valiéndose de ciencia ficción dura para sonar convincente.

El resultado es una obra efectiva. Sólo digerible para paladares finos.