Media votos
6,4
Votos
1.115
Críticas
677
Listas
32
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Mis críticas favoritas
- Contacto
-
Compartir su perfil
Voto de Gabriel Ufa:
8
6,7
309
Drama
Narra la historia de una niña que, en la Suecia de los años setenta, crece en una casa en la que la irresponsabilidad de sus padres y el consumo excesivo de alcohol marcan la convivencia familiar. (FILMAFFINITY)
10 de agosto de 2011
8 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Recomendaría esta película por Noomi Rapace. La descubrimos en "Millenium" (una inigualable y magistral Lisbeth Salander) y su talento no deja de sorprender. Es una fantástica actriz. Aquí tiene pocos diálogos, pero sus silencios, sus expresiones, sus gestos faciales, son casi más interesantes que sus palabras.
También la fenomenal dirección de Pernilla August, en una brillante opera prima, sabe darle el protagonismo que su personaje requiere. No en vano esta exitosa actriz tiene un currículum ilustre desde que trabajó con Ingmar Bergman en "Fanny y Alexander", pasando por la Palma de Oro en "Las mejores intenciones"en 1992, de su ya ex-marido Billie August. Esto se refleja en el trabajo de los actores, muy notable.
La película trata sobre un joven matrimonio con dos hijos pequeños que viven felizmente, hasta que reciben una llamada. La madre de Leena (Noomi Rapace) está gravemente enferma y le pide que acuda al hospital, situado en Ystad (Suecia), a 600 kilómetros. A través de impactantes flash-backs, vamos descubriendo cómo fue la infancia de Leena y su hermano menor, Sakari.
Es una película que va mostrando sus cartas poco a poco, en estudiada progresión. No a un ritmo rápido, pero nunca se detiene y el proceso dramático va en aumento. Lo que sí hace Pernilla August es reflejar de manera impactantemente real cómo puede afectar el pasado a una persona estable, normal, con una familia consolidada, hasta un punto inimaginable.
La ambientación de la Suecia de los 70 está muy conseguida: las ropas, las casas, el vecindario. Las interpretaciones son brillantes y la química entre actores es palpable: de hecho Noomi Rapace y Ola Rapace (que aparecía en "Juntos", de Lukas Moodyson) son marido y mujer también en la vida real.
El film tiene un punto de amargura interior que ahonda en la tristeza. A pesar de no ser especialmente lacrimógeno, a algunos espectadore puede hasta hacerles llorar, por cómo toca la fibra.
Si desde Millenium me declaré fan incondicional de Noomi Rapace, me vuelvo a ratificar. Bravo, Noomi, lo has vuelto a conseguir.
También la fenomenal dirección de Pernilla August, en una brillante opera prima, sabe darle el protagonismo que su personaje requiere. No en vano esta exitosa actriz tiene un currículum ilustre desde que trabajó con Ingmar Bergman en "Fanny y Alexander", pasando por la Palma de Oro en "Las mejores intenciones"en 1992, de su ya ex-marido Billie August. Esto se refleja en el trabajo de los actores, muy notable.
La película trata sobre un joven matrimonio con dos hijos pequeños que viven felizmente, hasta que reciben una llamada. La madre de Leena (Noomi Rapace) está gravemente enferma y le pide que acuda al hospital, situado en Ystad (Suecia), a 600 kilómetros. A través de impactantes flash-backs, vamos descubriendo cómo fue la infancia de Leena y su hermano menor, Sakari.
Es una película que va mostrando sus cartas poco a poco, en estudiada progresión. No a un ritmo rápido, pero nunca se detiene y el proceso dramático va en aumento. Lo que sí hace Pernilla August es reflejar de manera impactantemente real cómo puede afectar el pasado a una persona estable, normal, con una familia consolidada, hasta un punto inimaginable.
La ambientación de la Suecia de los 70 está muy conseguida: las ropas, las casas, el vecindario. Las interpretaciones son brillantes y la química entre actores es palpable: de hecho Noomi Rapace y Ola Rapace (que aparecía en "Juntos", de Lukas Moodyson) son marido y mujer también en la vida real.
El film tiene un punto de amargura interior que ahonda en la tristeza. A pesar de no ser especialmente lacrimógeno, a algunos espectadore puede hasta hacerles llorar, por cómo toca la fibra.
Si desde Millenium me declaré fan incondicional de Noomi Rapace, me vuelvo a ratificar. Bravo, Noomi, lo has vuelto a conseguir.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
No es una película de diálogos brillantes, sino de oscuros silencios. Evidentemente, refleja cómo el alcoholismo hace estragos.
Mi escena favorita es cuando Leena (Noomi Rapace) estalla, casi al final, y emite un grito de lamento descarnado. El marido tiene que sujetarla, es impresionante cómo refleja el dolor latente durante mucho tiempo. El marido no sabe nada, porque ella no ha querido (o podido) hablar, pero por ese grito escalofriante, y esa reacción, él imagina su tremendo sufrimiento interior, derivado de su durísima infancia.
El apoyo incondicional de la pareja se antoja un factor fundamental.
Mi escena favorita es cuando Leena (Noomi Rapace) estalla, casi al final, y emite un grito de lamento descarnado. El marido tiene que sujetarla, es impresionante cómo refleja el dolor latente durante mucho tiempo. El marido no sabe nada, porque ella no ha querido (o podido) hablar, pero por ese grito escalofriante, y esa reacción, él imagina su tremendo sufrimiento interior, derivado de su durísima infancia.
El apoyo incondicional de la pareja se antoja un factor fundamental.