Quizá sea porque somos de otra generación, quizá sea porque los años 40 tenían una manera de pensar muy distinta a nuestra época, quizá sea por el ritmo lento y cansino del metraje, pero señores, la película es un pestiño.

Les cuento un poco, una señora y un caballero se encuentran en la cafetería de una estación, repitiendo encuentros hasta llegar a ser "más o menos" amantes (tan amantes como parece que se podría ser en 1945), continuando esta dinámica durante todo el metraje.

No les puedo contar mucho más porque no hay más que decir, si les gusta la comedia romántica del cine clásico americano, esta es su película, pero si buscan algo con un poco más de movimiento, les aconsejo otro tipo de género.