Esta película no entra en el género de comedia porque no es graciosa y tengo dudas de si es romántica porque no hay una química entre los protagonistas, por lo menos no me lo creo. ¡Qué lastima! Con tanta creatividad en Hollywood y otra típica "comedia-romántica" americana que no te deja nada y que es totalmente olvidable.

Creo que es más bien contemplativa porque, aunque no hay una gran fotografía que observar o unas actuaciones memorables, sólo ves el mismo cuento de Dickens, un mal refrito, al que añades toques de romance (como si fuese receta) para relatar la historia de un Casanova (McConaughey) que puede cambiar en Navidad por el fantasma de su tío Wayne (Michael Douglas) y por los espíritus del pasado, presente y futuro que engloban a sus ex para poder amar de verdad.

Merece un 4 porque toda producción audiovisual conlleva un esfuerzo. Es para verla en la tele y no pagar por ella en el cine.