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Voto de Ro_Sauron:
7
Drama. Acción
Un cuento árabe ambientado en Europa sobre antiguos odios religiosos sustentados en 1.400 años de derramamiento de sangre entre dos facciones del Islam. Una historia de amor, de castigo, de culpabilidad y de redención que habla sobre la responsabilidad de cada uno sobre sus propios actos y la necesidad de elegir entre la venganza y la paz. Jamil se encuentra en medio de todo, librando la batalla de su vida – una batalla que tiene lugar en su interior. (FILMAFFINITY) [+]
12 de julio de 2014
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Inauguro mi maratón de filmografía de Dar Salim. Porque yo lo valgo.
Esta es una película bastante especial en su enfoque del Islam como religión de paz (que bueno, en el Corán como en la Biblia, en la primera página somos todos hermanos y qué bonito y 20 páginas más tarde ya estamos matando a gente y maldiciendo infieles, pero bueno, sí, religión de paz, un punto de vista como otro cualquiera) y un poco exagerada si imponemos un criterio realista. Y digo realista porque una película que se centra en una realidad social debería atenerse a lo que es factible/posible y dejar a un lado lo que es llevado in extremis o está descontextualizado.
El tema central es el odio legendario entre chiítas y suníes. Éstas son las dos principales ramas del Islam, siempre estrictamente separadas desde el punto de vista de sus respectivos creyentes, que llevan más de 1000 años discutiendo acerca de la verdadera línea sucesoria de Mahoma. Los chiítas se apoyan en la legitimidad del primo del profeta, Alí, los suníes insisten en que el verdadero sucesor era uno de los discípulos, Mu'awiyah. Hoy en día los suníes son mayoría (aproximadamente un 80 % de los creyentes, los chiítas componen un 20 %). Esto quiere decir que en la mayoría de las guerras por la sucesión los suníes han salido vencedores, y durante siglos los chiíes han pertenecido en muchas regiones a la clase de los marginados (Iraq, Arabia Saudí). Irán es aún un país que mantiene complicadas relaciones internacionales con el resto de sus hermanos musulmanes, pues la mayoría de su población es chiíta.
Este contexto histórico es el telón de fondo de la historia que aquí se nos relata, situada en la Dinamarca actual, en un Copenhage multicultural rebosante de inmigrantes búlgaros, libaneses, iraquíes y turcos, entre otras muchas nacionalidades.
El protagonista, Jamil, de la rama suní y de origen libanés, la acaba de montar gorda cargándose a un tipo del clan de los chiítas. Aparentemente, y según nos hacen entender, ambos clanes familiares han vivido en paz e incluso trabajado juntos durante muchos años, hasta que su relación se desquebraja súbitamente por el asesinato. Con su crimen Jamil ha abierto viejas heridas y provocado la guerra que durante algún tiempo habían logrado parar.
Esta es una película bastante especial en su enfoque del Islam como religión de paz (que bueno, en el Corán como en la Biblia, en la primera página somos todos hermanos y qué bonito y 20 páginas más tarde ya estamos matando a gente y maldiciendo infieles, pero bueno, sí, religión de paz, un punto de vista como otro cualquiera) y un poco exagerada si imponemos un criterio realista. Y digo realista porque una película que se centra en una realidad social debería atenerse a lo que es factible/posible y dejar a un lado lo que es llevado in extremis o está descontextualizado.
El tema central es el odio legendario entre chiítas y suníes. Éstas son las dos principales ramas del Islam, siempre estrictamente separadas desde el punto de vista de sus respectivos creyentes, que llevan más de 1000 años discutiendo acerca de la verdadera línea sucesoria de Mahoma. Los chiítas se apoyan en la legitimidad del primo del profeta, Alí, los suníes insisten en que el verdadero sucesor era uno de los discípulos, Mu'awiyah. Hoy en día los suníes son mayoría (aproximadamente un 80 % de los creyentes, los chiítas componen un 20 %). Esto quiere decir que en la mayoría de las guerras por la sucesión los suníes han salido vencedores, y durante siglos los chiíes han pertenecido en muchas regiones a la clase de los marginados (Iraq, Arabia Saudí). Irán es aún un país que mantiene complicadas relaciones internacionales con el resto de sus hermanos musulmanes, pues la mayoría de su población es chiíta.
Este contexto histórico es el telón de fondo de la historia que aquí se nos relata, situada en la Dinamarca actual, en un Copenhage multicultural rebosante de inmigrantes búlgaros, libaneses, iraquíes y turcos, entre otras muchas nacionalidades.
El protagonista, Jamil, de la rama suní y de origen libanés, la acaba de montar gorda cargándose a un tipo del clan de los chiítas. Aparentemente, y según nos hacen entender, ambos clanes familiares han vivido en paz e incluso trabajado juntos durante muchos años, hasta que su relación se desquebraja súbitamente por el asesinato. Con su crimen Jamil ha abierto viejas heridas y provocado la guerra que durante algún tiempo habían logrado parar.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
Cuando los chiítas van a buscar a Jamil al restaurante donde está escondido (cuyo propietario les traiciona haciendo la llamada para delatarlo), disparan por accidente a su mejor amigo (papel interpretado por el mismo Omar Shargawi, por cierto). El resto de sus amigos comienzan a obsesionarse con la venganza, y el círculo comienza a hacerse más grande. Los chiítas quieren a Jamil, los amigos de Jamil quieren a los chiítas.
Él está en el medio y su padre (interpretado por el papá de Shargawi, todo queda en familia) intenta hacerle entender que lo mejor es quedarse al margen para proteger a su familia, como él hizo cuando su esposa fue asesinada. Si la hubiera vengado, no habría podido criar a su hijo. Jamil responde que es por eso por lo que él ha matado al hombre del clan chiíta, el asesino de su madre, porque su padre no se había encargado de hacerlo antes.
Finalmente cede a los razonamientos de su padre, no sólo porque suenan lógicos, si no porque él mismo se da cuenta de que con la muerte de uno ha provocado una cadena de asesinatos que ni él mismo puede ya parar.
La figura del padre como protector del "verdadero" mensaje moral del Islam está muy bien construída y todas las escenas en las que aparece son enternecedoras. Las actuaciones son muy buenas, pero de vez en cuando el guión cae en frases tontas o diálogos demasiado simples. Cuál es en realidad el origen de todo esto? La madre de Jamil fue asesinada por los chiítas. Por qué razón? Sólo por ser suní? Eso no tiene sentido, y aunque perteneciesen todos a la misma rama del Islam, creo que la cadena de venganzas se produciría de todas formas.
Sabemos que Jamil y sus colegas, al igual que el clan de los chiítas, se dedican al trapicheo, o cómo mínimo a cosas no muy legales. Es posible que el honorable padre de Jamil también formase parte de eso en un pasado y por eso su mujer fue asesinada? Si no es así, por daños colaterales, quizás? Estaría bien que nos explicasen eso...
De todas formas, el desarrollo de la película está muy bien pensado, desde el principio hasta el brutal final. El planteamiento merece una nota alta, es simplemente el argumento lo que flojea de vez en cuando. Y he tenido la impresión como que en Copenhague la policía no existe. Ha sido raro.
Y nada más.
Por Dar Salim, de buena gana me orientaría a la Meca (para rezar, claro).
Él está en el medio y su padre (interpretado por el papá de Shargawi, todo queda en familia) intenta hacerle entender que lo mejor es quedarse al margen para proteger a su familia, como él hizo cuando su esposa fue asesinada. Si la hubiera vengado, no habría podido criar a su hijo. Jamil responde que es por eso por lo que él ha matado al hombre del clan chiíta, el asesino de su madre, porque su padre no se había encargado de hacerlo antes.
Finalmente cede a los razonamientos de su padre, no sólo porque suenan lógicos, si no porque él mismo se da cuenta de que con la muerte de uno ha provocado una cadena de asesinatos que ni él mismo puede ya parar.
La figura del padre como protector del "verdadero" mensaje moral del Islam está muy bien construída y todas las escenas en las que aparece son enternecedoras. Las actuaciones son muy buenas, pero de vez en cuando el guión cae en frases tontas o diálogos demasiado simples. Cuál es en realidad el origen de todo esto? La madre de Jamil fue asesinada por los chiítas. Por qué razón? Sólo por ser suní? Eso no tiene sentido, y aunque perteneciesen todos a la misma rama del Islam, creo que la cadena de venganzas se produciría de todas formas.
Sabemos que Jamil y sus colegas, al igual que el clan de los chiítas, se dedican al trapicheo, o cómo mínimo a cosas no muy legales. Es posible que el honorable padre de Jamil también formase parte de eso en un pasado y por eso su mujer fue asesinada? Si no es así, por daños colaterales, quizás? Estaría bien que nos explicasen eso...
De todas formas, el desarrollo de la película está muy bien pensado, desde el principio hasta el brutal final. El planteamiento merece una nota alta, es simplemente el argumento lo que flojea de vez en cuando. Y he tenido la impresión como que en Copenhague la policía no existe. Ha sido raro.
Y nada más.
Por Dar Salim, de buena gana me orientaría a la Meca (para rezar, claro).